No conformó ni a Moyano

Rápido para eliminar retenciones a las mineras pero lento para dar concesiones a los trabajadores, Macri anunció la suba del mínimo no imponible para los asalariados. Según el gobierno 180.000 asalariados dejarían de pagar este impuesto. Sin embargo, una cantidad difícil de determinar empezarían a tributar. Además, mantienen sin cambios a la tabla de alícuotas que establece qué porcentaje se descuenta, que sigue sin modificarse desde 1997. Tal es así que ni siquiera Hugo Moyano, uno de sus sindicalistas más cercanos, pudo mostrar entusiasmo (y a hasta disparó alguna crítica).

Ahora, con el Decreto 394/2016 no pagan el impuesto los solteros o solteras con sueldos de bolsillo hasta $18.880 ni los jefes de hogar con salarios hasta $25.000. En términos de salario bruto (sin descontar el 17,3% en cargas sociales e impuestos) corresponden a $22.830 y $30.230 respectivamente.

¿Cuántos pagan?
Los trabajadores que ya venían pagando este impuesto tendrán en lo inmediato cierto beneficio con este nuevo decreto que sube las Deducciones (ver recuadro). Sin embargo, al derogarse el Decreto 1242/2013 del anterior gobierno, comenzarán a pagar una cantidad incierta de asalariados. Esto ocurre porque con aquel decreto (y las posteriores resoluciones de AFIP) la escala de Deducciones (y el mínimo no imponible) estaba establecida según lo que cada trabajador había cobrado entre enero y agosto de 2013. Si en ese período un obrero había cobrado menos de $15.000 de salario bruto, era exceptuado de este impuesto sin importar lo que hubiera cobrado luego. Y si había cobrado hasta $25.000, tenía alguna reducción en el impuesto. Fue un sistema curioso con el cual el kirchnerismo intentó evitar mayor malestar.

Entonces, más allá de las particularidades de cada caso, vale tomar alguna referencia sobre cuánto fue la recomposición salarial en ese período para estimar cuántos trabajadores perdieron el beneficio que tenían hasta hace unos días. Para esto tomamos como referencia el Índice de Salario del INDEC entre septiembre de 2013 y octubre de 2015 (último valor publicado), que indica que en ese período los salarios privados registrados aumentaron un 71%.

Según esta estimación, un soltero o soltera que hoy cobra $22.830 de salario bruto –y por lo tanto ahora no paga impuesto– cobraba en agosto de 2013 unos $13.400 aproximadamente. Es decir, muy probablemente tampoco venía pagando el impuesto porque estaba exceptuado por el Decreto 1242/2013. Incremento salarial: 0% (ver tabla).

Además, podemos concluir que los asalariados que hoy cobran entre $22.830 y $26.000 de salario bruto aproximadamente no venían pagando este impuesto (nuevamente suponiendo la recomposición del 71%). Éste es aproximadamente el rango de trabajadores que se ven perjudicados por la nueva disposición y cuyos aumentos en paritarias, además, se empezarán a ver recortados por este impuesto. Una cuenta similar hizo incluso la Defensoría de la Tercera Edad y dedujo que 110.000 jubilados y pensionados con haberes de bolsillo entre $18.800 y $30.000 también pasarían ahora a tributar el impuesto. Contando trabajadores jubilados y activos: ¿son más los que empiezan a pagar o los que dejan de pagar? Difícil saberlo.

¿Cuánto pagan?
Los cálculos del gobierno estiman un incremento salarial incluso superior al 20%. Sin embargo, si consideramos que muchos trabajadores venían siendo alcanzados por la reducción establecida por la Resolución AFIP 3770/2015, el incremento real se reduce a un 10% o menos. En la tabla hacemos el cálculo para un trabajador/a que cobraba $25.000 brutos en septiembre de 2013 (el salario más alto que había sido alcanzado por aquella resolución); el beneficio salalrial ronda el 8%.

Estos porcentajes de incremento salarial –sensiblemente menores a los publicados por el gobierno– y la inflación cada vez más descontrolada dificultan aun más el intento de Macri de negociar aumentos por impuesto al salario.

El otro punto es la no actualización de las alícuotas que establecen el rango de descuentos en función de la parte del salario sujeta al impuesto, sin cambios ¡desde 1997! Se supone que el descuento debe ir aumentando progresivamente hasta llegar a un descuento del 35% para los salarios realmente altos, como ser gerentes de empresas o empresarios mismos que camuflan las ganancias empresariales con sueldos tremendamente abultados.

Sin embargo, desde 1997 la inflación fue de al menos 14 veces (tomando INDEC y GCABA). Hoy, todo trabajador cuyo sueldo supere en $9.231 a sus Deducciones tributará 35 centavos por cada peso que conquiste en paritarias. Este es el caso por ejemplo de un soltero con sueldo de $33.992 en bruto. Sueldo alto en comparación con el sueldo medio, aunque dista enormemente de los más de $100.000 mensuales del presidente, jueces o empresarios.

En definitiva, el gobierno macrista no sólo sostiene este impuesto al salario sino que las reducciones que efectivamente ha otorgado rápidamente serán absorbidas por la inflación.


Nuevas deducciones

Hasta el momento las Deducciones para trabajadores que pagan impuesto al salario comenzaban en $6.939. Recordemos que este valor dependía no sólo del grupo familiar (si tiene cónyuge y/o hijos aumentan las deducciones), sino también de lo que cobró la persona entre enero y agosto de 2013. Ahora este monto asciende a $18.880 para solteros; y será de $25.000 para un jefe de hogar con cónyuge y dos hijos. El cálculo de esta deducción se compone de la siguiente forma:

  • “Ganancia” no imponible: $3.255 por mes (se consideran 13 meses incluyendo aguinaldo).
  • Deducción especial para asalariados: $15.625 (ambas sumadas dan los $18.880 para solteros/as sin hijos).
  • Cónyuge: $3.060
  • Hijos: $1.530 (por cada uno).

Si al salario bruto le restamos las cargas sociales y estas deducciones (según cada caso), da como resultado la parte sujeta a impuesto o “ganancia neta”. Sobre esta parte se descuenta entre el 9% y el 35% (según la tabla del art. 90 de la Ley de Impuesto a las Ganancias).