
El imperialismo yanqui tiene los ojos puesto en Venezuela y la posibilidad de intervención militar es cada vez más explícita. Ahora ha sido el jefe del Comando Sur de Estados Unidos, almirante Craig Faller, quien advirtió que EEUU “podría” encabezar una intervención militar para desalojar al presidente Nicolás Maduro si éste sigue en el gobierno a fin de este año. En una entrevista de la revista norteamericana Foreign Policy, insistió en que están “contemplando varias opciones” y que sus fuerzas armadas estarán “listas” para cualquier decisión que tome el presidente Donald Trump (la información fue reproducida por Clarín, 12/4/19).
Trump ya había dicho en febrero que la intervención militar “es una opción”. La amenaza había sido luego reafirmada por el vice Mike Pence. Y los recientes dichos de Faller coinciden con las tratativas con Colombia y también con Brasil. El presidente de ese país, Jair Bolsonaro, viene estrechando su alianza con los EEUU y le ofreció una base militar en el norte brasilero. En febrero Brasil se integró al Comando Sur del ejército de los EEUU, integrando su subcomando y constituyendo un vergonzoso hecho histórico. Y EEUU está en tratativas para que a Brasil se le otorguen privilegios similares a aquellos del que gozan los miembros de la OTAN. Colombia, Brasil y Chile son los países con mayores lazos con los EEUU. Chile viene de liderar los ejercicios militares conjuntos RIMPAC realizados en el Pacífico en 2018, junto a EEUU y otros trece países desde Hawai.
Mientras tanto, la situación venezolana sigue sin perfilar soluciones. Los masivos cortes de energía son muestra del nivel de precariedad en infraestructura, sumando la desesperante falta de agua a la ya de por sí tremenda situación de hambruna. También su producción de petróleo sigue en picada, cayendo a 1.354 barriles diarios en 2018: un 29% menos respecto de 2017. Las perspectivas no son mejores, ya que en el primer trimestre de este año la producción cayó otro 29% respecto de 2017, ubicándose en 966 barriles diarios (OPEC, Reporte mensual del mercado de petróleo, abril de 2019). En este contexto, Maduro encarceló al segundo del autoproclamado presidente encargado Juan Guaidó y al paramilitar colombiano que oficia de militar en jefe. Y a Guaidó le prohibieron presentarse en cualquier cargo público; tras lo cual la oposición respondió con una masiva movilización.
Claramente, a EEUU no le importa la grave situación social venezolana y avanza con impedir los envíos de petróleo de Venezuela a Cuba, en su última ronda de sanciones para presionar al presidente Nicolás Maduro. Cortarían así un suministro crucial para la isla. Este tipo de sanciones están contenidas en el bloqueo de EEUU contra Cuba y forman parte de medidas extraterritoriales contra barcos que toquen puertos cubanos.
Al compás del intento de EEUU por aislar a Venezuela, se desintegra el Unasur. Brasil acaba de anunciar su retiro de ese organismo. Argentina sale del Unasur argumentando el “alto contenido ideológicos de su agenda” y desde el gobierno argentino se promueve la constitución del Prosur, propuesto a Macri en el mes de marzo por el chileno Sebastián Piñera, que tiene eje en la alianza con los EEUU. Desde este nuevo organismo regional, intentarán avanzar en el cerco a Venezuela así como marcarles la cancha a Cuba y Bolivia. Del Unasur ya se retiraron Brasil, Ecuador, Colombia y Argentina; mientras Paraguay, Chile y Perú suspendieron su participación.
Para su invasión, EEUU desafía a la nación venezolana. Y también a sus rivales: Rusia, que ya tiene al menos 100 soldados instalados en Venezuela, y China, que también envió medicamentos. Pero, fundamentalmente, necesita la división de la nación venezolana y sus fuerzas armadas en particular. A la ya de por sí grave situación venezolana, se le suma cada vez más la posibilidad de guerra, con varios imperialismos involucrados, y con consecuencias imprevisibles para Venezuela y nuestra América latina toda. No a la intervención de EEUU y de ningún imperialismo. Respeto a la autodeterminación. ¡Toda la solidaridad con el pueblo venezolano!





