Cuando en abril se firmó el nuevo endeudamiento con el FMI analizamos que, además de la tragedia de endeudarnos por generaciones, las consecuencias serían recesivas, de mayor destrucción industrial, en una nueva fase que seguía a la provocada en el 2024 tras el ajuste iniciado con la devaluación del 118 % en diciembre del 2023.
Para bajar la inflación, el gobierno de Milei lo hace en base a establecer una dinámica económica que consiste en planchar el dólar a como dé lugar, desregular abriendo importaciones y reducir salarios para achicar el mercado nacional. Esto conduce a la caída masiva del consumo de bienes y servicios de producción local, cierre de empresas y desocupación. En los casos donde las empresas se ajustan, los lineamientos comunes de sus acciones son reducir costos a través de salarios, aumento de ritmos de trabajo, multitareas, despidos y suspensiones, amparados en poderes que les dio la Ley Bases para ir contra los trabajadores. En estas últimas semana un factor de crisis se agravó: las tasas de interés del 80 al 100% para capturar pesos de los bancos y del 350% para giros en descubierto para los deudores traerá otra ola de quiebras para las empresas que caminan en la cornisa.
Resumimos algunos ejemplos de este desastre productivo y laboral, tomando tres ramas fundamentales de la producción: Alimentación, Construcción y Petroquímica. Lo mismo se repite en la industria textil con las empresas Alpargatas en Corrientes o Platex, Tecotex, Santista, Topper en Tucumán; en la industria automotriz como Scania en Tucumán y Crucianelli en Cordoba; en la industria del neumático con las empresas Fate, Pirelli y Brighstone; en la metalúrgica como Escabe en Mar del Plata, en la industria papelera con Kimberley Clarck que deja de producir en el país o la histórica Lumilagro que pasa a importar todo de China. Mientras tanto, late el conflicto por posibles 17 mil despidos en la industria de Tierra del Fuego en impase hasta diciembre.
Algunas de las empresas con despidos, suspensiones o al borde de la quiebra:
Alimentación
• Molinos Río de la Plata: Productora de alimentos. Sus trabajadores están en lucha en su planta de Esteban Echeverría contra 10 despidos en junio, con amenaza de 22 más y rebaja salarial por eliminación de todos los adicionales no remunerativos de los últimos años.
• Frigorífico Daveza: Empresa de la ciudad de Azul exportadora de carnes. A fines de abril despidió a 40 obreros de la carne por pérdida de mercados de exportación por dólar planchado y eliminación de controles sanitarios por la motosierra en el SENASA.
• Rebozados Vaca SA: Productora de milanesas envasadas. El 1 de junio despidió a sus 12 obreros y cerró su planta en Colonia Tirolesa en Córdoba por caída de ventas y futura reconversión de la empresa.
• Frigorífico Anselmo: Empresa de la ciudad de Tres Arroyos de faena de carnes para consumo interno y exportación. En mayo despidió a 26 obreros, el 25% de su planta. La caída del consumo popular de carne y el ingreso de carnes de Brasil aceleran la crisis.
• Lácteos: Verónica: Histórica empresa de lácteos con 3 plantas en Santa Fe amenaza con 200 despidos. Viene en crisis hace 8 años con una patronal evasora que sub facturaba exportaciones. Con la caída del consumo de leche y derivados hoy está al borde de la cesación de pagos. Sancor: Al borde de la quiebra por deudas de 400 millones de dólares, ya despidió 500 obreros en los últimos años, produciendo al 20% de la capacidad y con la caída del consumo no logra pagar sueldos de los 850 trabajadores que aún tiene. Arsa: láctea del grupo mafioso Vicentin produce yoghures y postres para Sancor. Está paralizada hace semanas por maniobras de vaciamiento patronal y denuncias penales.
• Tambos: En lo que va del gobierno se cerraron más de 1000 tambos productores de leche.
• Georgalos: Empresa de golosinas con plantas en Tigre y en Córdoba. Despidió en junio 5 obreros y los trabajadores respondieron con corte en la Panamericana. Los despidos vinieron después de reducción de obreros en las líneas y aumento de ritmo de producción que condujo a reclamos y una huelga. La patronal busca reducir costos por el dólar planchado y mantener precios en sus productos exportables.
Construcción
• Cerámicas Cortines: Empresa de la ciudad de Lujan. Presentó recurso de crisis para despedir 120 trabajadores de 400 y suspensión del resto con salarios al 80%. Tiene la planta parada desde febrero. Este año sus ventas cayeron al 10% de lo que eran hace 4 años y los costos de luz y gas para la producción se dispararon.
• Cerro Negro: Empresa de cerámicas y ladrillos con plantas en Olavarría, Campana y Córdoba. Anunció la suspensión de 150 obreros en Olavarría por 2 meses en línea de cerámicas con salarios al 80%. Desde octubre se parara la línea de ladrillos por falta de ventas.
• Porcelanatos Ilva: Empresa con planta en Pilar. Suspendió rotativamente sus 280 obreros en mayo y junio. En julio propuso pagar aguinaldo en 3 cuotas. Asamblea de obreros lo rechazó y protestan en la puerta desde hace días.
• Forestadora Tapebicuá: Es una de las principales empresas de Virasoro, Corrientes. La planta frenó su actividad por 30 días y suspendió a sus 520 operarios. La empresa, además, adeuda salarios y hay incertidumbre por el futuro.
Petroquímica
• Petroquímica Río Tercero: La histórica empresa del sur cordobés anunció otros 120 trabajadores despedidos que se suman a los 100 del 2024. El sindicato anunció un plan de lucha.
• Clariant y Arcrhoma: Clariant es una empresa química de capitales suizos que anuncio el cierre de su planta en Zarate y despido de sus 50 obreros. Importará desde Brasil los productos que producía aquí. Al mismo tiempo Arcrhoma también de Zarate despidió a sus 25 obreros cerrando su planta.