Bahía Blanca: Petroquímicos conmemoraron un paro histórico

El salón estaba repleto, más de 1000 compañeros y compañeras de las distintas empresas del Polo Petroquímico, el Parque Industrial y del puerto, juntos para reivindicar un camino de lucha, de unidad y trabajo que se eligió. A 10 años del paro histórico que marco a fuego y dio vida a un sindicalismo solidario, serio y con conciencia de clase; que recuperó primero el gremio para poder retomar las mejores tradiciones de lucha del movimiento obrero argentino. Un camino que permitió grandes conquistas en lo salarial, las condiciones de trabajo, los convenios colectivos y creció enormemente como institución en lo social y en su patrimonio, transformándose en un punto de referencia para los bahienses.

Hasta el mínimo detalle estaba muy bien organizado, por la agrupación 8 de Julio. Los reconocimientos y los videos mostrando la historia de esta lucha fueron el momento previo a las palabras del secretario general del SPIQPyA, Julio Leguizamón, que fueron seguidas con muchísima atención.

Extractos del discurso

“Es fundamental para los que lo vivimos, para lo que estuvimos allí, recordarlo y transmitírselo a los más jóvenes. (…) Es bueno que uno aprenda con la experiencia de los más grandes y no tenga que pasar por las situaciones tan difíciles como las que pasamos nosotros. Si las circunstancias se dan y les toca vivir momentos difíciles como los nuestros, también estén preparados, como lo hicimos en ese momento para lucharla y para pelearla.”
Absolutamente solos contra todos

“Muchas veces no nos acordamos que en esa época, ese 8 de julio, se unificaron todas las empresas. Sacaron comunicados contra nosotros la Unión Industrial, la Cámara de Comercio de Industria, el Parque Industrial y el poder político. Nos hicieron denuncias de todo tipo, gente del municipio y de las empresas. Nos enfrentamos directamente al poder entero.”

“Los medios de prensa hacían programas especiales, nos dedicaron dos o tres tapas en los diarios. (…) Éramos lo peor que le podía pasar a Bahía Blanca y yo creo que para el poder constituido que manejaba absolutamente todo en beneficio de unos pocos. Para ellos si éramos un enemigo muy duro. Y nosotros, a pesar de esa dificultad, a pesar de tener todo en contra, contábamos solamente con la unidad y la fuerza de todos los trabajadores del polo, todos tenían miedo de estar cerca nuestro, pero no nos importó y nos jugamos.”

Primero recuperar el gremio

“Nos jugamos todo por cambiar muchos años en los que el sindicato había actuado mal. Habíamos perdido muchas luchas, perdido muchas condiciones de trabajo, donde eran pésimas las cosas que vivían los compañeros. Un proceso que llevo muchos años. Primero hubo que hacer conciencia, afiliar a la gente, hablar mucho de unidad y tuvimos que sacar una dirigencia anterior que era la imagen de todo ese sistema. Todo esto culminó en el 8 de julio. Este cambio, con la unidad de todos nosotros contra todo el poder establecido, forjó las bases de este gremio diferente.”

Tener memoria

“Quiero agradecerles a todos los que aportaron su granito de arena para cambiar la historia, no solo de este sindicato, sino la historia de como enfrentar al poder establecido en Bahía Blanca. (…) Seguramente fuimos en ese momento un mal ejemplo y por eso tuvimos tantos enemigos. Pero el resultado, lo vemos día a día, lo vemos en los convenios, en las condiciones de trabajo, en los salarios, lo vemos por nuestra unidad, por nuestra fuerza y por la continuidad y por qué día a día estamos en las plantas. El 8 de julio está reflejado en nuestro compromiso, en los compañeros que participan en la agrupación, en la comisión directiva y en el trabajo de los delegados.”

“Para eso me acompaña una Comisión Directiva de trabajo y de esfuerzo. Para eso hay un grupo grande de delegados que todos los días están con sus compañeros en planta, poniendo el cuerpo para que estemos mejor. (…) Todo lo que se forjó ese día, es lo que nosotros tenemos que cuidar y no sólo cuidar, sino que hacerlo crecer. Todavía falta mucho.”

“Por sobre todas las cosas, debemos tener memoria, no olvidarnos como estábamos, no olvidarnos de dónde venimos y no olvidarnos todo lo que nos costó, ese sacrificio, ese esfuerzo y sobre todo, nuestra responsabilidad como dirigentes. (…) El día de la asamblea que votó el paro, había muchas dudas, gente que no quería, mucha desconfianza y no sabíamos lo que iba pasar, había que jugársela, pero sabiendo que no nos quedaba otra y que ese era nuestro camino. (…) Hubo gente, que cuando terminó la votación y se decidió ir al paro me dijo: ‘te hago responsable por lo que va a pasar’. Le contesté lo mismo que digo ahora y voy a decir siempre: me hago responsable, de lo bueno, de lo malo, de lo que pasó y lo que va a pasar, por el bien de todos los afiliados.”

Somos clase trabajadora

“Simplemente le queremos dejar una enseñanza para los jóvenes que se incorporan. Una enseñanza de lucha de sacrificio y de esfuerzo. (…) Que no nos confundan: ni los jefes, ni las empresas son nuestros amigos, porque debemos aprender de la experiencia, no importa la categoría que tengamos, ni el lugar que ocupemos en la empresa. Nosotros debemos siempre recordar que somos clase obrera, clase trabajadora y que todo lo que consiguió históricamente nuestra clase fue en base a la lucha y al esfuerzo. Jamás, pero jamás a los trabajadores le regalaron nada y nosotros somos el mejor ejemplo de eso.”

Corresponsal