El “empalme” de Macri

Mauricio Macri anunció el plan de “empalme” o “blanqueo” con la creación de una “agencia de talentos” para capacitar a trabajadores de organizaciones sociales –donde tendrán prioridad las del acuerdo de paz social firmado con el gobierno– y las “bolsas de trabajo” de los sindicatos que se alíen al gobierno como la UATRE.

Se incorporan al mercado laboral a personas que cobran planes sociales a cambio de la rebaja de contribuciones patronales. Así dan como en la década menemista un paso fundamental para la precarización laboral, sin estabilidad, ya que el blanqueo que habla el gobierno es de “trabajador pasante”, no estando contemplados en los convenios colectivos de la rama en que trabaje. Esta modalidad, como ya la hemos vivido, pesará como una daga sobre el cuello de los trabajadores en planta efectiva, llevando a un enfrentamiento de “pobres contra pobres”. Así surgieron en la década menemista las “agencias de trabajo temporario” armadas por los monopolios. Pero ahora también se suma el Estado.

De esta manera el gobierno introduce este plan como “la creación de nuevos puestos de trabajo”, variando los índices de desocupación, como ya hace con el crecimiento del monotributo donde lo cuenta como nuevos trabajadores, cuándo justamente son lo inverso: nuevos desocupados que se anotan en el monotributo social. Así arranca la campaña electoral el gobierno de Macri.