Como parte del proceso de normalización de Comisiones Gremiales Internas, tras dos años de pandemia, las Asociación Bancaria convocó a elecciones para la renovación de las comisiones gremiales internas que venían con mandato prorrogado a causa de la situación de aislamiento que ésta produjo.
En el Banco Central, el 5 de mayo se realizaron las elecciones de CGI dónde, luego de un intento de unificación frustrado, finalmente dos listas disputaron su conducción. La lista 46 (dónde participa un compañero de Liberación Popular), que en esta contienda obtuvo el 26,4% y la Lista 1430 (que venía siendo conducción), que obtuvo el 73,6%.
La elección se dio en el contexto de un gran acuerdo paritario al que había llegado la Asociación Bancaria con la conducción de Sergio Palazzo, y con un balance de gestión gremial local sin grandes logros, pero sin sobresaltos, manteniendo en gran medida las conquistas históricas en una situación compleja. De esa manera, el debate central se desarrolló alrededor de las nuevas formas de organización laboral que la pandemia nos impuso y la lógica de una modalidad mixta entre lo presencial y lo remoto que se viene desarrollando en el Banco.
Una vez pasada la pandemia y las necesidades de aislamiento sanitario, con la vuelta al colegio y la apertura de actividades, fue ganando terreno la idea del teletrabajo como un punto programático a conquistar o, en su defecto, a no retornar al sistema presencial como había hasta antes de la pandemia. Esto nos impone a la vez grandes desafíos como movimiento de trabajadores, ya que la virtualidad ha desestructurado en gran medida el movimiento. Nos obliga a buscar también nuevas formas en la organización gremial.
En ese contexto desde la lista 46, se buscó la unidad con la lista 1430, en primer lugar, porque en ambas listas participan compañeros y compañeras que integran la Lista Nacional que llevó a Sergio Palazzo a la reelección como Secretario General Nacional del Sindicato, y forman parte de su conducción, y por otro lado, la situación nacional nos obliga a cerrar filas ante posibles cambios bruscos de situación. Lamentablemente en esta oportunidad, como sucedió la elección anterior, tampoco pudo llegarse a un armado unitario.
Corresponsal
