La inflación del mes de marzo, según publicó el INDEC, fue de 2,3% a nivel nacional. En la zona de Capital y Gran Buenos Aires fue aún mayor: 2,5%. Con esto, la inflación acumulada en los últimos 12 meses llega a 25,4%, mientras que en marzo de 2017 había sido de 24,8%.
El acumulado de este año, en tan solo los tres primeros meses ya es de 6,7%, un 45% de la “meta” de 15% fijada por el gobierno para todo el año. Y el propio “Relevamiento de Expectativas de Mercado” publicado por el BCRA ya supera el 20% para este año.
El aumento general de precios en marzo fue mayor que el mes anterior, a pesar de que no se registraron en marzo aumentos de tarifas de luz, gas o transporte. Esta vez fue empujado hacia arriba por los alimentos y bebidas, la indumentaria, el equipamiento del hogar y los costos de la educación.
Incluso este mes, la denominada “inflación núcleo” (que no tiene en cuenta los precios regulados y estacionales, y que el gobierno toma como referencia para correr de escena los tarifazos) fue de 2,6%, mayor al índice general y el punto más elevado de los últimos 15 meses. Fue subiendo de 1,5% en enero, 2,1% en febrero y 2,6% en marzo. Esto está relacionado con el efecto cascada de los tarifazos de los servicios públicos y de la devaluación de diciembre y enero que repercuten en aumento de costos de producción y en aumentos de precios de todos los bienes y servicios en los meses siguientes.
El gobierno sigue diciendo que combate la inflación recortando el salario real de los trabajadores y manteniendo altísimas tasas de interés. Mientras tanto preparó para abril el tarifazo de 39% en el gas, 12% en colectivos, 14% en trenes, y el efecto dominó del último aumento de las naftas de 3,5%.