Mentiras «libertarias» sobre el golpe de 1976

Como a quien le duele que el pueblo se movilice en la calle, durante el 24M el gobierno pretendió responder con un video filmado desde la Casa Rosada dando la versión negacionista de la historia en boca de Agustín Laje. Este videíto no sólo no tuvo mayor trascendencia, sino que incluso quedó opacado por la respuesta punto por punto realizada por el historiador Pablo Borda. Entrevistado en Gelatina, sintetizó las mentiras de Laje, de las cuales puntualizamos:

  1. Es falso que no se habla del período anterior al golpe del 24 de marzo de 1976. Incluso, esta temática está en el diseño curricular de la Ley de Educación Nacional, también de la provincia de Buenos Aires o en Canal Encuentro.
  2. “La violencia empezó con la guerrilla”. Falso. Porque el golpe de 1976 es el sexto en el siglo 20 argentino. Además, un punto de inflexión decisivo en la violencia política golpista fue el bombardeo a la Plaza de Mayo del 16 de junio de 1955. Y la masacre de Trelew el 22 de agosto de 1972. Además, previo a la dictadura de 176, ya había desapariciones forzadas como por ejemplo Felipe Vallese.
  3. Laje apunta a la influencia cubana… Y oculta deliberadamente el accionar estadounidense, comenzando por el adoctrinamiento a militares argentinos. “Desde el ’57 en adelante tenemos a nuestros militares preparándose para una guerra interna, basada en la doctrina de la Escuela Francesa, la doctrina de la Seguridad Nacional estadounidense y después mezclando todo esos elementos nacionales en la doctrina de la Guerra Antisubversiva, como llamaron los militares”, cuestionó Borda y recordó a la Escuela de las Américas, que funcionaba en Panamá y en Estados Unidos. Luego, ya en la década de los ’70, funcionó el Plan Cóndor.
  4. Laje retoma y cuestiona la “casta política” pero… ni menciona lo que podría llamarse la “casta empresarial”, que se benefició con el golpe de estado. Tan evidente era dicho beneficio que incluso hubo centros clandestinos de detención dentro de algunas empresas como Ingenio La Fronterita en Tucumán o Ford. Nunca hubo ninguna denuncia de las empresas por estas detenciones ilegales. Incluso, gerentes de Ford han sido condenados por facilitar los secuestros dentro de la planta.

A las mentiras de Laje y el ocultamiento deliberado de ciertos hechos claves, podemos sumar su mentira en primera persona: Agustín Laje nunca vio desde afuera el accionar militar, sino que tiene lazos de sangre, en Córdoba su provincia natal, con el genocida y torturador teniente coronel Raúl Eduardo Fierro, alias “El francés”. Hermano de su abuela, Fierro fue condenado por los crímenes de 30 detenidos, por el tormento seguido de muerte de una víctima y por las torturas a 32 presos políticos. Otro detalle que Laje omitió en su “historia completa”.