Repudio a la visita de Obama

Es miércoles, son las 16:30hs en Buenos Aires, la ciudad está conmocionada por la llegada del primer mandatario estadounidense. Los subtes funcionan a medias, los teléfonos no funcionan y las calles están cortadas en las zonas donde se encuentra Obama. La mayoría de los canales de televisión intenta mostrar al presidente de Estado Unidos como alguien humano y amable. Los principales medios se concentran en las personas que, emocionadas, le hacen preguntas en la Usina del Arte. Pese a toda la presión mediática cientos de personas preparan la marcha del 24 de marzo con pancartas, bombos y banderas para repudiar el golpe y recordar a los desaparecidos, pero también para rechazar la visita de Obama a Argentina.

En medio de esos preparativos cientos de personas marchan un día antes a la embajada de Estados Unidos. No faltó ningún ingrediente, una cabecera conjunto con una enorme bandera sostenida por todos los dirigentes de las organizaciones, bombos, banderas y hasta un buitre gigante que fue incendiado en las vallas del enorme operativo desplegado por la policía.