Editorial | Sí al control de precios y bajar la inflación, No al acuerdo con el FMI y Cambiemos

El gobierno del Frente de Todxs congeló los precios de 1.450 productos por tres meses. Lo hizo ante el descontrol de aumentos que produjeron las 50 grandes empresas de alimentos. Demoró en hacerlo y ésa fue una de las razones por la que muchos no lo votaron en las PASO. La mayoría de las empresas aceptó la resolución. Pero Arcor, Molinos y Ledesma resisten aunque son las que más ganaron este año.

Juntos por el Cambio se opone a controlar el precio de los alimentos. Con ellos siempre perdemos los trabajadores y el pueblo. Los medios opositores con periodistas desaforados promueven la desestabilización política y económica. Ellos se ríen en la pantalla, pero pagamos nosotros! Son los que con un juez “amigo” suspendieron el decreto que ponía límite a las tarifas de cable, celular e internet.

El gobierno enfrenta a gran parte del poder económico y no es fácil. Porque a diferencia de la lucha contra el covid –donde el gobierno cuenta con el sistema público hospitalario y administró el plan de vacunación que está reduciendo los casos–, desde las privatizaciones menemistas el Estado casi no interviene en la producción, salvo a través de YPF y algunas pocas empresas.

Las causas de la inflación
Además de los monopolios formadores de precios, como en octubre del año pasado hay un embate para subir el dólar oficial que determina los precios de importación y exportación. Nuevamente hay fondos de inversión comprando dólares para fugarse. Hace un año Cambiemos y los monopolios exportadores fracasaron en torcerle el brazo al gobierno para que subiera el dólar oficial, que logró mantenerlo alrededor de los $100.

También los mecanismos monetario-financieros como las Leliq del Banco Central, que Cambiemos llevó a una tasa del 78%; si bien el gobierno se la bajó, no logró desactivarlas y hoy con 43% de interés también le ponen un piso a la inflación.
No son las jubilaciones, la educación, la salud ni la asistencia social lo que empuja la inflación como dicen Cambiemos, Milei y su socio Espert. Además ellos se opusieron al impuesto a las grandes fortunas que aportó ingresos genuinos al presupuesto.

El FMI y las potencias industriales impulsaron al endeudamiento descontrolado de los países dependientes como la Argentina para apalancar sus bicicletas financieras y también para que siguiéramos consumiendo productos importados. Ahora esas deudas son impagables. El sistema capitalista imperialista, desde EEUU a China, marcha a una crisis mundial donde ninguna deuda es “sostenible”.

Cambiemos empuja a la hiperinflación
No apoyamos la búsqueda de un acuerdo desde el gobierno con Cambiemos, los grandes grupos empresarios y bancarios para acordar los pagos al FMI. Además, ya se lo han rechazado una y otra vez. Es un camino de fracaso para los intereses del pueblo!

Juntos por el Cambio y esos grupos apuestan a que explote la bomba híper inflacionaria y presentar al gobierno como responsable. Con eso pretenden bajar salarios, jubilaciones, educación, salud y asistencia social. Y después ir por el control del gobierno con elecciones o mediante el mecanismo parlamentario. Para eso quieren Macri y Larreta tener mayoría en Diputados y Senadores!

Una salida popular
El 14 de noviembre llamamos votar por el Frente de Todxs porque tenemos que apuntalar esta dura pulseada con el poder económico y la reacción desestabilizadora. Y porque junto a un conjunto de fuerzas del Frente que nos movilizamos el 17 de Octubre decimos: No al acuerdo con el FMI, los grandes grupos económicos y Cambiemos! Porque es con el voto y también con el pueblo en las calles.

Con Juntos x el Cambio viene una nueva ofensiva antipopular, como ya lo han explicitado Rodríguez Larreta y varios legisladores con su proyecto de eliminación de las indemnizaciones. Un proyecto en el mismo sentido de las políticas que en los 90’s derivaron en desocupación y pobreza récord, y en el estallido del 2001.

Para el pueblo y la Nación, la salida es un Estado que recupere su rol activo en la producción y la economía. Un paso en este sentido ha sido la estatización de la metalúrgica IMPSA. Se debe insistir también en el desarrollo de una empresa estatal de alimentos, que genere trabajo, enhebre pymes y producciones nacional, y ponga un freno a los monopolios formadores de precios. Por esto trabajamos para revertir el resultado en noviembre, enfrentando el apriete ajustador del FMI por la deuda que crearon con Macri y Cambiemos, sosteniendo nuestro programa de 10 medidas para salir de la pandemia con más trabajo y salario.