Desde el 23 al 25 de noviembre se realiza en San Juan el 28° Encuentro Nacional de Mujeres. Vamos mujeres trabajadoras, estudiantes, de la ciudad, de los barrios, del campo, de los pueblos originarios, etc. Vamos a intercambiar experiencias, a debatir, a compartir, a hacer balance, a avanzar en nuestra organización. Nuestra lucha ha tenido importantes logros en los últimos años, aunque la mayoría de nuestros problemas siguen sin resolverse y sin respuesta de parte del gobierno nacional y de los gobiernos locales.
Este encuentro se libra en un contexto de gran confrontación entre el gobierno nacional y las otras variantes de las clases dominantes, luego del duro castigo que recibió el kirchnerismo en las elecciones. Si los de arriba se pelean, podemos aprovecharlo. Pero por sobre todo tenemos que seguir confiando en nuestras propias fuerzas.
En estos años la lucha de las mujeres ha logrado varios triunfos. Se ha conquistado la ley contra la violencia hacia las mujeres, la de educación sexual integral, de salud sexual y procreación responsable, entre otras. Logramos que exista la figura del femicidio y que la Corte Suprema se pronuncie a favor de la realización de los abortos no punibles. La ley contra la trata de personas fue modificada luego de la reacción popular frente al vergonzoso juicio a los secuestradores de Marita Verón, quitando de su articulado la figura del “consentimiento”. Sin embargo, la realidad cotidiana nos muestra que nuestros problemas están lejos de haber sido resueltos.
Nuestros motivos
En los últimos 4 años la violencia hacia las mujeres se cobró 1.300 víctimas: una mujer cada 35hs. Así la ley contra la violencia se convierte en letra muerta; mientras el gobierno recorta aún más el presupuesto destinado a la ejecución de la ley.
Además, miles son las mujeres que mueren al año por abortos clandestinos y muchas más las que terminan hospitalizadas. Cada vez se hace más clara la necesidad de la legalización del derecho al aborto, a la par de políticas de salud y educación sexual.
Por otro lado, permanecen en nuestro país 600 mujeres secuestradas por las redes de trata, mientras que los proxenetas y sus cómplices políticos siguen caminando tranquilos por la calle. Cada día se ve más claramente la complicidad del poder político judicial y de las fuerzas de seguridad. El jefe del bloque K de la provincia de Santa Cruz, Rubén Contreras, defendió públicamente la instalación de prostíbulos en la provincia.
Las mujeres trabajadoras seguimos siendo las más flexibilizadas y superexplotadas. Los grandes monopolios extorsionan para la superexplotación a las madres solteras o sostén de familia. En muchos casos cobran menos por el mismo trabajo que los varones y siguen habiendo tareas reservadas para ellos y vedadas para las mujeres. En todos estos años no se ha promovido ninguna ley que impida estos actos de discriminación laboral, ni tampoco que reglamente la creación de jardines y las licencias específicas siguen siendo una cuenta pendiente.
El gobierno K y la Iglesia
Nuestra realidad muestra la verdadera esencia del kirchnerismo, tras diez años de gobierno. Para que no queden dudas Daniel Filmus declaró, en relación a las mujeres que no trabajan ni estudian y tienen niños menores de 5 años, que gracias a la Asignación Universal por Hijo: “están en el lugar que tienen que estar, cuidando a los chicos”. Así dejan claro el lugar que para ellos debe ocupar la mujer en la sociedad, lejos de la escuela o el trabajo.
Por su parte, la elección de Jorge Bergoglio como Papa y muchas de sus declaraciones muestran una Iglesia que busca reacomodarse, repudiada por las denuncias de pedofilia y corrupción. Bergoglio plantea el perdón a las mujeres que abortaron y a los divorciados. Pero sólo en caso de que se arrepientan; por lo que no cambia la posición de la Iglesia respecto de estos temas, al igual que la oposición a los métodos anticonceptivos y la educación sexual, a la vez que sigue alentando el accionar de los “objetores de conciencia” en los hospitales.
El kirchnerismo abrió expectativas en que se fuese a avanzar en el tratamiento de una ley que despenalizara y legalizara el derecho al aborto. Sin embargo, no solo bloqueó su tratamiento en el Congreso, sino que luego de la designación de Jorge Bergoglio como Papa, endureció aún más su posición. Aníbal Fernández aseveró que la legalización del aborto “es imposible”.
Cada vez más
Pero cada vez somos más quienes nos movilizamos por los derechos de las mujeres trabajadoras, para terminar con la violencia y los femicidios, contra la trata y la prostitución. También por la aprobación de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, presentada por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto y va a ser uno de los reclamos principales de este 28º Encuentro Nacional de Mujeres.
Es un avance la conformación de agrupaciones de mujeres, como Insurrectas, que impulsan la creación de secretarías o comisiones de mujeres en los centros de estudiantes, sindicatos, organizaciones barriales, etc. Para que el conjunto de las mujeres puedan ser protagonistas de las luchas.
Colmemos este Encuentro, para que constituya una instancia de reagrupamiento y unidad del movimiento de mujeres, para reforzar la lucha en todo el país.