Pino, por siempre en la memoria popular

Muchos y muchas sentimos la triste noticia de la partida de Fernando Pino Solanas. Cineasta y político, su producción y su militancia ha atravesado los últimos ochenta años de nuestra historia. Uno de sus últimos momentos memorables fue su discurso en el Senado por la legalización del aborto en 2018. Ante aquel resultado adverso alentó: “Si no sale hoy, el año que viene vamos a insistir. Y si no sale el año que viene, insistiremos el otro.” Esa incansable voluntad de pelea lo tuvo siempre buscando aportar a la lucha popular, denunciando el saqueo de nuestros recursos, reivindicando nuestras capacidades productivas, defendiendo nuestra soberanía y clamando por la liberación.

Fue electo varias veces como legislador del Congreso Nacional. La última vez, como diputado porteño por el Frente de Todxs, frente que contribuyó decididamente a constituir para dejar atrás la pesadilla macrista. Luego fue designado como embajador argentino ante la Unesco, residiendo en la misma Francia que lo había tenido en su exilio durante la última dictadura. La distancia no le impidió pronunciarse por la expropiación de Vicentín. Y aún desde su internación por Covid siguió transmitiendo su mensaje de esperanza, esta vez frente a la última lucha que pudo dar en vida.

Pino tuvo un destacado rol en la conformación del Frente de Todxs.

Como cineasta comprometido, registró cada período y fundó el grupo Cine Liberación. Reflejó la resistencia peronista y antidictatorial en La Hora de los Hornos (1968) y otros documentales, que incluyeron sus entrevistas al propio Juan Domingo Perón en el exilio. Poco antes del golpe de 1976, él mismo partió al exilio luego de que un comando de la Marina intentara secuestrarlo. Recibió la vuelta de la democracia argentina con El exilio de Gardel (1986).

Su participación como candidato en las elecciones se concretó luego de sufrir un atentado en 1991, recibiendo cuatro disparos en las piernas luego de cuestionar públicamente al entonces presidente Carlos Menem. En 1993 fue elegido diputado nacional por Buenos Aires por el Frente Grande, una fuerza que expresó en ese momento el descontento popular con la entrega menemista y también con la UCR que firmó el Pacto de Olivos. Memorias del saqueo (2004) muestra el retroceso social de aquellos años. Allí reivindica nuestra YPF estatal y cierra, no por casualidad, con imágenes de días posteriores al Argentinazo de 2001: esa rebelión popular que puso fin a la convertibilidad y sus nefastas políticas privatistas, industricidas, antinacionales y antipopulares.

Perón junto a los cineastas Pino Solanas, Octavio Getino y Gerardo Vallejos, del grupo Cine Liberación.

Las últimas décadas lo tuvo reivindicando nuestra Argentina latente (2007), los ferrocarriles nacionales fotografiados en La próxima estación (2008) y reclamando por la vuelta atrás de las privatizaciones. Dio especial impulso a Proyecto Sur, partido por el cuál fue electo nuevamente diputado en 2009 y en donde sumó además el reclamo ecológico que fue expresando en sus últimas películas.

Los comunistas revolucionarios hemos coincidido numerosas veces en los frentes políticos que impulsó Pino. Algunas otras no tanto. Pero indudablemente Pino es un referente de la lucha del pueblo por la liberación.