Cumbre borrascosa

Alberto Fernández, en el momento que hace notar la exclusión de las Islas Malvinas del logo del encuentro.

La 9º Cumbre de la Américas, realizada en Los Ángeles, no le salió bien a Estados Unidos. La ausencia de los presidentes Andrés Manuel López Obrador de México, Luis Arce de Bolivia, Xiomara Castro de Honduras y Alejandro Giammattei de Guatemala en rechazo a la exclusión de Cuba, Nicaragua y Venezuela junto a la intervención de Alberto Fernández como presidente pro témpore de la CELAC, marcaron el encuentro. También Alberto Fernández pidió la remoción del secretario general de la OEA, Luis Almagro, por su rol en el golpe en Bolivia en el que estuvo involucrado EEUU. AMLO además mandó a su canciller y cuestionó: “No acepto hegemonías ni de China, ni de Rusia, ni de Estados Unidos. Todos los países, por pequeños que sean, son libres y son independientes”.

Uno de los ejes del evento fue precisamente “Gobernabilidad Democrática”. A partir de este eje, la gestión de Biden se autoatribuyó la potestad de excluir a los gobiernos que considera no democráticos. Pero dio pie a las fuertes críticas al titular de la Organización de Estados Americanos (OEA) por haber apoyado al golpismo en Bolivia; y las críticas fueron también –más o menos diplomáticamente– para Estados Unidos que no tardó en reconocer como presidenta a Jeanine Áñez, ahora condenada por 10 años. “La OEA debe ser reestructurada removiendo de inmediato a quienes la conducen”, expresó Alberto Fernández. El pedido fue apoyado por el canciller mexicano. Recordemos que también la presidenta actual hondureña, Xiomara Castro, fue electa derrotando al golpismo alentado por Estados Unidos. En definitiva EEUU recibió críticas certeras en el propio eje político “libertad vs totalitarismo” que diseñó para hostigar diplomáticamente a Rusia y China.


AMLO: “No acepto hegemonías ni de China, ni de Rusia, ni de Estados Unidos. Todos los países, por pequeños que sean, son libres y son independientes.”


Sin tanto para balancear en la diplomacia del continente, el gobierno de Biden debió conformarse con haber logrado un acuerdo para regular la migración legal y frenar la ilegal, suscrito solo por 20 de los 35 países de la región: algo tal vez útil a efectos de su disputa doméstica con Trump.

Otros temas importantes planteados por Alberto Fernández fueron: El rechazo de los bloqueos a Cuba y Venezuela y el reclamo de soberanía de las Islas Malvinas, haciendo notar que había sido excluida del logo de la Cumbre. También la necesidad de “construir escenarios de negociación que le pongan fin a la catástrofe bélica” producto de la “invasión de Rusia sobre Ucrania”.