“Como a los nazis les va a pasar, a donde vayan los iremos a buscar.” La canción, atronadora, sonaba en un subte que iba hacia el Congreso y que, a pesar del feriado, estaba repleto como en las peores horas pico de la semana. Y es que fuimos cientos de miles en todo el país los que este 24 de marzo, a 40 años del golpe de 1976, ganamos las calles en repudio del genocidio de Estado, de la política macrista y de la presencia del jefe del imperialismo yanqui en nuestro país.
Desde el mediodía la Plaza de Mayo se empezó a llenar con la convocatoria realizada desde las organizaciones de derechos humanos afines al kirchnerismo. Y por la tarde arribaron las masivas columnas del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, compuesto por más de 200 organizaciones de derechos humanos, gremiales, sociales y políticas.
Así, este Encuentro expresó una posición independiente de todo gobierno y de lucha contra la impunidad de ayer y de hoy, como lo viene haciendo desde hace 20 años cuando se conformó. Fue este Encuentro también el que denunció el nombramiento de Milani al frente del Ejército durante el kirchnerismo, la sanción de las leyes antiterroristas, las represiones de Berni y el Proyecto X.
Ese día, además de irse rápidamente para Bariloche tras su solitario acto en el Parque de la Memoria (ver aparte), el gobierno tuvo que sacar las banderitas norteamericanas con las que, en un verdadero acto de cipayismo, había adornado la Plaza de Mayo el día anterior. Es que el pueblo no olvida ni perdona el rol que tuvo el imperialismo yanqui, junto a otros imperialismos y las clases dominantes locales, en el golpe y la dictadura. Ni su rol actual.
Muy a pesar del gobierno, este 24 no pasó desapercibido ni pudo ser diluido. Cientos de miles, en las calles como debe ser, volvimos a honrar la lucha de nuestros 30.000 desaparecidos y a reafirmar que, a 40 años del golpe genocida, no nos han quebrado ni vencido, y que seguimos luchando contra la impunidad de ayer y de hoy y en el camino de la liberación.
¿A qué vino el golpe?
Ante el cínico “Nunca Más violencia institucional y política” de Macri, el documento del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia leído en la Plaza de Mayo denunció: “Con el nuevo gobierno volvieron a asomar la cabeza los partidarios de la ‘teoría de los dos demonios’ y las operaciones para terminar con los juicios. Los funcionarios macristas hablan abiertamente de reconciliación. El secretario de Derechos Humanos Claudio Avruj propone mandar a los genocidas condenados a sus casas y recibe a los familiares de los militares genocidas como si fueran víctimas. En el mismo sentido, Lopérfido niega la existencia de 30.000 detenidos desaparecidos. Macri nombra a genocidas como funcionarios de su gobierno. El caso más grave es el del coronel retirado Osvaldo Tosco, designado director general de política internacional del Ministerio de defensa, quien participó del Operativo Independencia y fue instructor sobre métodos de tortura en Mar del Plata durante la dictadura”.
El balance del Encuentro sobre el golpe es directo y claro: “Hoy, a 40 años del golpe, repudiamos, a la dictadura que, a costa de la sangre de nuestro pueblo, impuso la entrega y el endeudamiento, la explotación y el hambre. Repudiamos el genocidio que impuso la desaparición de hombres, mujeres, jóvenes y niños, como paradigma del terror; el asesinato, la cárcel, el exilio, el secuestro, la tortura y el robo de niños. Genocidio que tuvo como objetivo aniquilar el amplísimo movimiento obrero y popular que se proponía conseguir profundas transformaciones en la Argentina. Por esto se buscó destruir todas las formas de organización de los trabajadores y el pueblo: cuerpos de delegados, centros de estudiantes, organizaciones políticas, barriales, profesionales, las más diversas militancias, que habían ganado las calles a partir del Cordobazo”.
Ayer y hoy
El Encuentro también denunció el ajuste, el saqueo y la represión de Macri y los gobiernos provinciales, repudió la presencia de Obama en nuestro país y rechazó los avances en la criminalización de la protesta y la impunidad, como con el protocolo antipiquetes, las condenas a los docentes y camioneros fueguinos y la prisión domiciliaria para Pedraza.
Como final, sostuvo: “Hoy, a 40 años del golpe genocida seguimos luchando, porque cada conquista obtenida nos da más fuerza para seguir, porque así hicimos retroceder a la dictadura, porque así rompimos la impunidad absoluta que se quiso imponer con leyes e indultos y enfrentamos a los gobiernos del hambre y la entrega, porque así llevamos a juicio y condena a muchos represores, porque así recuperamos 119 nietos, porque así no nos doblegaron y hoy estamos aquí y en las plazas de todo el país, miles de argentinos y hermanos latinoamericanos, que no olvidamos y no perdonamos, que vamos a seguir por memoria, verdad, justicia y por la liberación para nuestro pueblo. Porque a 40 años hoy estamos aquí, decimos: 30.000 compañeros detenidos-desaparecidos ¡presente! ¡ahora y siempre!”.