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En la edición 186° de Al Frente contamos sobre la asamblea fraudulenta –a la que se impidió el acceso de estudiantes por medio de patovicas contratados– realizada por la conducción de Franja Morada y Nuevo Derecho con el fin de suprimir las elecciones anuales de Centro de Estudiantes, y de esta manera subordinarlas a las de Consejo Directivo (bianuales) bajo control de los decanatos, implicando una pérdida de autonomía por parte del movimiento estudiantil. Es un intento por minimizar las instancias de protagonismo del movimiento estudiantil, dado que en las elecciones se discute el balance del Centro, de las agrupaciones que disputan su conducción y el rol que debe tomar el mismo, no solo en función de sus necesidades sectoriales, sino respecto de la política universitaria y nacional.
Resaltamos que este hecho no se produjo de forma aislada, sino que en otras facultades donde los centros son conducidos por fuerzas de ese mismo arco político, como FADU –dirigida por Reformismo Estudiantil (ex Franja Morada) y Coalición– o Económicas y Medicina (Nuevo Espacio), realizaron maniobras similares.
En la Facultad de Arquitectura y Diseños, habiéndose vencido los mandatos de un año para los cuales fueron elegidas la Comisión Directiva y la Presidencia –en elecciones que, cabe recordar, estuvieron llenas de prácticas fraudulentas y antidemocráticas (ver nota edición Nº 185)(2)– se realizó una reunión de la Comisión Directiva para la cual ni siquiera se dio aviso a los vocales no oficialistas.
Desde La Corriente nos opusimos a la propuesta de suspender las elecciones y de auto extenderse el mandato por un año más. Y presentamos por escrito la contramoción de realizar las elecciones este año, de manera autónoma (no subordinada a las elecciones de Consejo Directivo manipuladas desde el Decanato), y de la necesidad de realizarlas entre los meses de septiembre y octubre de manera que los estudiantes puedan elegir contando con un balance de cada una de las listas que se presentan –como no sucedió en las elecciones realizadas a dos días de empezar las clases el año pasado–. Con esta misma posición, y sobre la base del vencimiento de los mandatos, pasamos por talleres impulsando el armado del Cuerpo de Delegados, las Comisiones por área (Cultural, Académico-Gremial y de Mujeres, Género y Diversidades, entre otras), además del reclamo por aumento de los montos de becas y con la iniciativa del Festi Fadu.
En Económicas, con el antecedente de la asamblea farsa de Derecho todavía presente, Nuevo Espacio realizó una votación sin darle convocatoria por los medios públicos que establece el estatuto y violando otras reglas estatutarias.
Por su parte, la IGJ (Inspección General de Justicia), notificada de las irregularidades en la asamblea de Derecho, dejó sin efecto la misma.
De fondo, lo que buscan con estas maniobras es desarticular la organización del movimiento estudiantil en un contexto, donde no solo crecen las barreras económico-sociales para acceder a la educación, sino de empeoramiento generalizado de las condiciones de vida y de cara a un escenario incierto respecto del rumbo y la salida que puede llegar a tener esta crisis que se sigue agudizando y que ya cuenta con candidatos que proponen arancelar la educación pública con un sistema de vouchers, como Milei.
La organización del movimiento estudiantil todavía sufre las consecuencias del parate de la presencialidad producto de la pandemia, con generaciones a las que la dinámica de lucha que funcionó hasta finales del 2019 les resulta ajena. Sin embargo, hay una gran avidez por parte de quienes, frente a este panorama, se extrañan al no encontrar agrupaciones con un abordaje político, sino que se quedan solo con reivindicaciones como la del papel de los baños y en actividades como cursos de aprendizaje, ayuda a inscripciones, etc. Esto lo venimos registrando en los piqueteos realizados durante el mes de prensa Al Frente.
En última instancia, lo que determinará el desarrollo de este conflicto será el grado de participación por parte del conjunto de los estudiantes en actividades que los convoquen a tomar la iniciativa contra esta avanzada reaccionaria. Y en eso, el rol que tengamos las fuerzas populares para impulsar dichas actividades partiendo de los intereses y necesidades de los estudiantes.
Corresponsal