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En una sociedad en crisis, fragmentada y sin salida aparente, Milei ganó las PASO para presidente con un 30%. Se desplomó la oposición de JxC con 17% Bullrich y 11% Larreta. UP sumó el 21% de Massa y el 6% de Grabois. Kicillof se afirmó en el camino de su reelección con el 36%. Votó solo el 70% del padrón.
El desacople acentuó la disociación de la elección presidencial con la de gobernadores e intendentes. Pero de todas maneras, donde se elegía además gobernador, como en las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos, CABA, Catamarca, Mendoza y Santa Cruz, ninguno de los candidatos de La Libertad Avanza ganó y tampoco Milei; con excepción de Mendoza y Santa Cruz, donde sí se impuso en la PASO presidencial al igual que en catorce provincias más. Porque, además de las mencionadas, perdió solo en Santiago del Estero, Chaco, Formosa y Corrientes.
Hasta las PASO, el centro de la confrontación de Unión por la Patria fue contra JxC y principalmente Bullrich, que se perfilaba ganadora ante Larreta, por lo que la boleta de Milei en parte fue un vehículo para el desmoronamiento de JxC y Bullrich. De todas maneras, sorprendió que Milei pasara el umbral de los 30 puntos nacionales y que en algunas provincias, como Salta, llegara al 49%, San Luis 48%, Mendoza 45% y Misiones 43%. Aunque lo que evidencian esos números, comparado con el 21% de Massa y el 6% de Grabois, es que Milei no solo le comió a JxC, sino también al peronismo y a Unión por la Patria.
Son seis años de declive salarial y social desde que se desató cualitativamente la inflación el 28 de diciembre de 2017 durante el gobierno de Macri, y que el gobierno del Frente de Todos no logró recomponer. La inflación golpea los bolsillos particularmente en los alimentos donde el gobierno ha sido impotente frente a la voracidad de 30 monopolios formadores de precios. Y en paralelo a esto, el drama de la inseguridad y la expansión del narcotráfico. El balance del gobierno hasta acá es haber evitado la recesión, a pesar de la pandemia, la guerra y la sequía, pero con una crecimiento que hoy incluso languidece y que sólo incorporó trabajo precarizado o mal remunerado.
Con apenas 6,2 millones de personas en relación de dependencia en blanco –incluidos los estatales y municipales– sobre una población económicamente activa de 14,2 millones y con 2,9 millones de monotributistas, queda expuest la degradación del tejido laboral a 47 años de la desindustrialización y el endeudamiento de la dictadura, la hiper de Alfonsín, las privatizaciones y la convertibilidad de Menem y Cavallo, el 2001 de De la Rúa, la sojización y el despoblamiento agrario y la deuda del FMI de Macri. Una Argentina que se “ordena” para exportar soja, petróleo, gas y litio, y se desordena para la mayoría de su población.
¿Qué es Milei?
Hay una perspectiva adversa para la juventud, sin posibilidad de trabajo estable y medianamente remunerado, ni crédito para la vivienda y condiciones inalcanzables para alquilar. En las barriadas, de un lado está el camino de la droga y el chorreo, y del otro el de estudiar y trabajar expuestos al afano y a la muerte a cualquier hora del día. Esta situación de la infancia, los adolescentes y jóvenes resonó con el asesinato de Morena tres días antes de las PASO. Y en otros sectores, la perspectiva desgarradora de la emigración. En esta situación se coló Milei y su engañosa proclama contra “la casta” política, de dolarización contra la inflación y privatización para desarrollo individual, y penetró fuerte en la juventud incluso principalmente de los estratos más bajos.
Pero Milei, antes que político y economista, es un filósofo dedicado a la batalla cultural, a imagen y semejanza de su mentor Venegas Linch (h), a quien reconoce permanentemente. Una filosofía que plantea que todo en la sociedad es tratable como mercancía (hasta los niños y los órganos), por lo que el mercado sería el ordenador no solo de la economía, sino de toda de la sociedad. Por lo que cualquier regulación, subsidio o protección alteraría el “orden natural”. Bajo la escuela ultraliberal del austriaco Hayek y los chicago boys, van más allá que Adam Smith. Sobre todo porque el capitalismo de libre competencia contemporáneo a Adam Smith no existe más desde hace 150 años. Porque precisamente la competencia y la consecuente concentración del capital ha llevado a su opuesto: el dominio de la economía por parte de los monopolios y la división del mundo en dos tipos de países: imperialistas y oprimidos.
Pero la proclamación de su ideología ultra liberal capitalista no es al margen del conflicto político internacional en el que EEUU intenta mantener la hegemonía del sistema capitalista imperialista mundial, que China hoy desafía. Y no es al margen del balance que presentan hoy, principalmente para la juventud, Venezuela, Cuba o Nicaragua y lo que se denominó “socialismo del siglo XXI”. Y con ese sentido se jugó por ejemplo el video de Fito Páez sobre Cuba.
Milei es occidente, se embandera con los Rolling Stones. No es Elegante y los pibes chorros. Desde ahí hasta se da el lujo de iniciar todos sus actos, a los que denomina “recitales”, con una deformación libertaria cantada a grito pelado, de una canción de La Renga, que sin éxito lo ha demandado. Milei es explícitamente Trump y Bolsonaro. Milei, como Trump, es también el sionismo extremo en Israel. Y además Milei se opone al aborto y propone un plebiscito para derogar la Ley que da derecho a la Interrupción Voluntaria del Embarazo aprobada a fines de 2020.
Pero por todo esto, punto por punto, Milei reivindica a Menem como “el mejor presidente de la historia argentina” y a Cavallo también “como el mejor ministro de economía”. Porque incluso Menem sumó una convención internacional que defiende “la defensa de la vida desde la concepción” para bloquear el aborto. Y desde ya privatizaciones, convertibilidad e incluso un tardío intento de dolarización.
Milei luego de anticomunista es antiradical (UCR). Para él, el populismo se inicia con Hipólito Irigoyen y el peor presidente de la historia es Alfonsín. Milei disputa el peronismo desde la reivindicación de Menem. Y como si faltara algo, además de que tiene a Roque Fernández en economía, Milei ahora es farandulero como “el Carlo” con Yuyito González (y muchas más) y parece haber abandonado a su hermana por Fátima Florez. Es más, para tener a un Menem en sus listas, le otorgó la franquicia en La Rioja de su partido a Martín Menem, sobrino del ex presidente.
Entre su vocación preponderantemente filosófica, su inestabilidad emocional y probablemente psicológica, Milei podría no ser apto para el cargo de presidente. Pero de todas maneras se la ve muy estable a su vice, Victoria Villarruel, una negacionista del genocidio. Aquí y en la alianza de Milei con el hijo del genocida y ex gobernador de Tucuman Antonio Bussi surge nuevamente otro puente a Menem: el indulto a las Juntas genocidas de 1991.
Quienes entran al ballotage y a qué jugaría Macri
El desplome de JxC y Bullrich al 17% hubiera sido imposible sin Milei, pero se fue muy arriba. ¿Es 30% muy arriba, o es que Massa con 21% es muy abajo? La devaluación del 22% del día después no suma. Aunque, el ministro-presidente-candidato se esforzó en ventilar el apriete del FMI para que fuera del 100% y luego el 60%, como pedían también Milei y Bullrich. Al cierre de esta edición, se espera el inicio de una lista de medidas que será informando diariamente. El reclamo lo encabezan la suma fija y el control de precios de los alimentos.
Pero quizás la clave del desenlace hacia un resultado esté en JxC. Macri no ocultó su simpatía por “las ideas de Milei” en el bunker como cierre del “festejo” por el triunfo de Patricia Bullrich sobre Larreta 17% a 11%. Mauricio también ya ha dicho en otra oportunidad que el “populismo” empezó con Irigoyen y el radicalismo, coincidiendo con Milei. Junto con Larreta fue derrotado Morales que es el presidente de la UCR y tras cartón fue designada como candidata a vicejefa de CABA, Clara Muzzio, una larretista del PRO que acompañará a Jorge Macri, el primo, en su marcha hacia la Jefatura del gobierno porteño.
Federico Stotani (h) ya ha manifestado que están evaluando si apoyan a Bullrich. Los radicales tienen la teoría de “que se doble, pero que no se parta”; en realidad Alem lo dijo al revés, pero en algún momento de la historia lo dieron vuelta. Quizás no les quede mucho tiempo para darle la razón a Alem nuevamente. Sobre todo porque si al ballotage entran Milei y Massa, Macri ya ha insinuado su simpatía por las ideas del libertario.
También en Macri pesa la simpatía por Trump, que graficó hace un año con una foto junto al ex presidente norteamericano en su mansión de Mar-a-Lago. Después de todo, fue el que movió los hilos del FMI para que le prestaran 45 mil millones de dólares para fugar. Esto permite entender por qué Stanley, el Embajador de EEUU de la administración Biden, promovía un acuerdo entre Massa y Larreta. Hasta cierto punto la táctica definida por CFK, que promovió a Massa y habilitó a Grabois, aprovecha la furibunda interna yanqui para enfrentar a la reacción.
Al cierre de esta edición el gobierno habría controlado, con más de 80 detenciones, los saqueos que se intentaron generalizar desde el fin de semana largo, que comenzaron en Mendoza y Córdoba para terminar con epicentro en la provincia de Buenos Aires. Desestabilizar al gobierno, o de máxima voltearlo, pareciera ser el intento de algunos para asegurarse un ballotage Milei-Bullrich.
Ahora en las calles como el CONICET y con el voto a UP en octubre
Unión por la Patria es el instrumento para impedir un triunfo liberal reaccionario de Milei o Bullrich. Pero esto también depende de que Massa sume apoyo a partir de resolver los problemas más urgentes y acuciantes para los trabajadores y el pueblo. Se espera su regreso tras la aprobación por parte del directorio del FMI de un desembolso que podría superar los 7.500 millones de dólares y el anuncio de un paquete de medidas que incluirían una suma fija a los salarios, créditos y medidas paliativas ante el agravamiento inflacionario y el riesgo recesivo.
Por su parte ya han salido a la calle los científicos del CONICET a rechazar los planes privatistas; y los inquilinos frente a los cambios en la ley de alquileres que impulsan JxC y LLA. Obtuvo dictamen de comisión el proyecto de ley que impone el requisito de 2/3 del Congreso para transferir acciones de Aerolíneas Argentinas. Comienza a organizarse el movimiento universitario para defender la educación pública; y el movimiento de mujeres y diversidades por sus derechos.
A la vez, la situación social y económica se agrava; y hay monopolios como Ledesma del azúcar que remarcan no solo para ganar más plata; o corridas del dólar de ánimo destituyente e hiperinflacionario. La situación exige medidas para anticiparse y que apunten a resolver la inflación, que es el principal problema de la gente y el que más le juega en contra al gobierno.
No pretendemos que Massa enarbole nuestro programa. Sabemos incluso que aún ganando UP, la situación será inestable y conflictiva. Más aún si triunfan Milei o Bullrich. Porque hoy en la sociedad argentina laten antagonismos irresueltos; y para avanzar en resolverlos en favor del pueblo y los trabajadores hace falta avanzar con medidas concretas de fondo. Y por ese camino, enfrentar a la reacción y encontrar las vías de aproximación para avanzar en un proceso de liberación nacional y de reconfiguración revolucionaria del Estado. Es el programa concreto que demanda la resolución del pueblo y los trabajadores de los problemas hoy ineludibles: inflación, precios, alimentos, vivienda, seguridad, sistema penal, salud y educación. Sintéticamente:
- Suma fija a los salarios y control de precios.
- Parar la inflación: congelar las Lelics y que paguen los bancos y monopolios fugadores, y no los ahorristas y las pymes. Control estatal de las divisas, basta de fuga, brokers y timba financiera. Control estatal del comercio exterior y puertos.
- No al acuerdo del FMI. Ni diez años y tasa punitiva del 4%, ni imposiciones.
- Por una empresa estatal de alimentos.
- Enfrentar al narcotráfico. Basta de inseguridad.
- Desatar la lucha en defensa del salario y los convenios, la educación y la salud pública, el sistema previsional, de ciencia y técnica, y las empresas del Estado.
Hoy está en juego la continuidad de la educación y la salud pública y gratuita, del sistema y la edad jubilatoria, del subsidio a las tarifas y el boleto, y de los convenios colectivos de trabajo. También están en juego la reprivatización de YPF, Aerolíneas Argentinas y AySA, y de las acciones en manos de ANSES. Se juega la liberación de los genocidas y la sumisión al FMI, a la timba financiera y el extractivismo de los monopolios. Quedan dos meses. Con Grabois ya sumamos 1.390.585 votos a Unión por la Patria. Tenemos que sumar más para impedir un triunfo liberal reaccionario.