Estudiantes que enseñan

Uno de los notables protagonistas del debate por el aborto legal ha sido, sin dudas, el movimiento estudiantil. Particularmente, las y los estudiantes secundarios. Desde Vamos! entrevistamos a Yael, estudiante del colegio Carlos Pellegrini y vocal de su centro de estudiantes Cecap.
–¿Se aplica hoy en día la Educación Sexual Integral en tu escuela?
–La ESI no se aplica en mi escuela. Capaz que algunos profesores nos pueden dar clases, algunos que se toman el trabajo de darse un tiempo para darnos ESI, y ponen buzones y cosas así. Pero no está implementada. No hubo capacitación para los docentes para que se formen. Y nosotros además, con respecto a eso, este año aprobamos un proyecto de protocolo contra la violencia de géneros, que todavía no se implementa pero ya tenemos aprobado el proyecto.
–¿En qué consiste el protocolo?
–El protocolo consiste es poder recibir las denuncias tanto por abuso como acosos de los profesores o mismo de alumnos, compañeros nuestros. Los dos tienen anexos diferentes de cómo accionar. La denuncia podría ser hecha por el denunciante sin permiso de sus padres o de responsable a su cargo. La idea es poder solucionar el problema, buscar una solución para la convivencia entre las dos personas.
–¿Sabés si hay ESI en otras escuelas?
–Yo las que conozco, ya sea por amigos que tenga ahí o porque me han dicho, no hay una materia, no se da en general. No tenemos materia de Educación Sexual. Tenemos Biología y nuestra profesora de Biología, si te toca una buena profesora o profesor, se anima y nos dio anticoncepción, todo. Depende del profesor que tenga cada uno.
–¿Se habla de aborto en los colegios?
–Se habla de aborto en todos lados. Imaginate que mismo los departamentos, cuando escriben las guías, no ponen cualquier cosa al azar sino algo que tenga que ver con el aborto. Casi siempre, cuando los chicos que pasan a hablar, se arma un debate. También depende del profesor. Pero sí, siempre, en todo momento.
Tiene que ver con que es un derecho que tienen que tener las mujeres y cuerpo-gestantes para poder decidir sobre ellas mismas y que claramente no sea una construcción que venga de la Iglesia y si no de la necesidad de la salud pública.
–¿Cómo se organizaron ante el debate en el Congreso?
–En todas las escuelas en general se han hecho un montón de cosas. En el Pelle se han hecho festivales, debates, pañuelazos y hemos ido a todos los Martes Verdes en el Congreso. Obviamente íbamos mucha más gente cuando era uno como la apertura o para el Estudiantazo, que con el Pelle realizamos una intervención artística cortando la calle.
Para las vigilias nos organizamos en cuadrillas para turnarnos. Los chicos se quedaron cuidando la escuela así podíamos ir nosotras principalmente. Obviamente que el que quería podía venir, pero tenía que haber gente en la escuela y había que limpiarla también. A la noche dormimos en el Pelle porque somos menores y muchos padres no los dejan a sus hijos.
En esas columnas cuando íbamos éramos bastante gente. Entonces íbamos con la bandera por la calle y de la seguridad, todo nos ocupábamos las pibas y si necesitábamos ayuda, obviamente, como había pasado el 4J o el 8M, la manejábamos nosotras.
–¿Por qué pensás que el movimiento estudiantil secundario se volcó tan fuerte a la lucha por el derecho al aborto legal?
–Porque va más allá de nuestra familia, nuestras madres y hermanas y lo que pueda afectar en nuestro entorno, sino también nosotras mismas. Porque nos podemos quedar embarazadas por falta de educación sexual. Nosotras también estamos en la misma situación. Y aparte todas las generaciones tienen lo suyo. Y tal como en algún momento se ha aprobado la ley de matrimonio igualitario, ahora se aprueba esto y luchamos por los derechos de las mujeres.