Compañeras y compañeros del MP Liberación se reunieron con Héctor Arce Rodríguez, alcalde de Omereque, Bolivia, e integrante del MAS. El encuentro, realizado en el galpón de la Corriente Clasista René Salamanca-AMBA situado en el barrio porteño de Soldati, surgió a impulso de compañeras bolivianas de esta organización. Rodríguez visitó la Argentina para reunirse con el presidente Evo Morales, asilado ahora en nuestro país. Y aprovechó el viaje para reunirse también con organizaciones sociales y políticas de nuestro país, con el objetivo de fortalecer el arco de solidaridad.
Entre gaseosa, mate y facturas “de masa”, el intercambio con el alcalde duró cerca de tres horas. Tras una brevísima presentación de Sergio Párraga, coordinador de la Corriente, Rodríguez comenzó primero haciendo un balance político del gobierno de Morales hasta el desenlace del golpe de Estado. Citó ejemplos de cómo se avanzó en lo económico, en la salud y lo educativo en su propia alcandía. “Ha democratizado la economía”, insistió en referencia al gobierno de Evo. También hubo lugar a algunas importantes autocríticas, atentamente escuchadas por los presentes.
Sobre el golpe de Estado, destacó el odio anti indígena y anti wiphala que expresa. Compartió incluso la amenaza racista que recibió él mismo tras una dura denuncia pública que realizara al comandante departamental de la Policía. La amenaza incluyó insultos tales como “indio mugroso” y “comemierda”, y concluye: “he prometido dejarte en silla de ruedas”.
Luego de su primera intervención, hubo lugar para algunas preguntas, en relación al rol de las Fuerzas Armadas en el golpe, la injerencia de EEUU, los intereses en el yacimiento de litio, la posición de la Central Obrera Boliviana, las perspectivas de convocatoria a elecciones y la situación actual de la Asamblea Legislativa. A raíz de una pregunta, quedó de manifiesto el punto de quiebre que significó la masacre de Senkata por parte del Ejército; que continuó luego con la represión al masivo cortejo fúnebre al día siguiente. “Buscaban un escarmiento”, puntualizó.
Hubo una ronda en la que opinaron la mayoría de las compañeras presentes, contando el dolor con que viven el golpe en Bolivia y manifestando su voluntad de contribuir activamente en apoyo al candidato que elija el MAS. Dos compañeras, que viajaron a su país justo en momentos del golpe, contaron cómo percibieron las discusiones y las peleas en sus localidades natales. Así se fueron agregando más temas, como la disputa de la juventud, el armado de las pandillas parapoliciales de motoqueros o las divisiones que se dan dentro de las propias familias. Una compañera, que había sido protagonista de la Guerra del Agua en 2000 y Guerra del Gas en 2003, expresó con desazón: “¡Tanta lucha hicimos para sacar a aquel vendepatria!”.
La campaña en Argentina tiene gran importancia debido a que aquí reside la colectividad más numerosa fuera de Bolivia, aunque precisamente por este motivo es de esperarse maniobras por parte del gobierno de facto boliviano. En encuentro finalizó con una foto de los presentes, entre quienes estuvieron Magaly Condori Cruz –coordinadora CCRS de La Matanza–, Silvia Aquino –coordinadora CCRS de CABA– y Guillermo Rocha –secretario CR y coordinador MP Liberación–. Y se reforzó el compromiso de la organización de sumar fuerzas y militancia contra los golpistas.
