Bajo el lema “Matanza Vacunate”, ingresamos al tercer mes de campaña de inscripción para la aplicación de la vacuna anti Covid-19. En el mes de marzo el Municipio le propuso a Liberación Popular del distrito integrase a la campaña, tal como publicamos en nuestra edición Nº 165 (“Barrio por barrio, promoviendo la vacunación”). Desde enero habíamos puesto en marcha a decenas de cuadrillas de barrido e higiene en las distintas localidades con el programa Potenciar Trabajo. En ese momento las vacunas todavía llegaban escasamente y comenzaba la aplicación en personal de salud fundamentalmente. Cuando nos llegó la propuesta en marzo, la debatimos a partir de ubicar la principal tarea política en este momento, que es el combate a la pandemia. Arrancamos con una experiencia piloto en González Catán y Virrey del Pino, combinando la inscripción con mesas en lugares de mucha circulación junto con grupos de rastrillaje casa por casa.
Puesta en marcha
Para la puesta en marcha de las actividades de promoción de la vacunación, debatimos la forma de garantizar las medidas sanitarias para cada grupo de manera de no ser afectados por el virus ni ser vehículo del mismo. Las mesas y rastrillaje son compartidos en el territorio entre Liberación Popular y la Agrupación Lealtad y Trabajo del peronismo matancero. En pocas semanas, los inscriptos fueron de cientos de vecinos que se acercaban a las mesas con toda la esperanza de la vacuna; o nos recibían en las puertas de sus casas con todo el agradecimiento posible a la tarea que estábamos realizando. “La gente te agradece, más que todo de la tercera edad. A mí me pasó que nos vinieron a dar empanaditas y nos dijeron que ya han sido vacunadas” contó Claudia Botitano –integrante de Liberación Popular de Laferrere–.
Según explicó Claudia, el objetivo de la campaña es “concientizar a la gente, que sí o sí tiene que recibir la dosis para que no haya más contagiados y más que todo para evitar la muerte”. Milagros Miranda –de Villa Celina– agregó que había “mucha gente que no sabía cómo inscribirse, por [dificultades de acceso a] la tecnología”. “Mas que todo a las personas mayores, ya que les cuesta manejar un poco la tecnología”, señaló Cristina Canaviri.
Contracampaña
“Hay gente que no quería vacunarse porque supuestamente no quiere morir”, explicó Milagros recogiendo la opinión de una parte que se hizo eco de la campaña de desprestigio de las vacunas promovida desde Juntos por el Cambio y algunos importantes medios opositores. En el mismo sentido, hubo quienes opinaban que las vacunas no servían. Quienes tenían dudas, con unos minutos de argumentación y de amable charla, con información precisa y lugares de donde sacar información verídica, se convencían en inscribirse.
Por otra parte, nos encontramos con vecinos que desconfiaban de suministrar datos para la inscripción, ya que es común la mala utilización de datos personales por parte de grupos que se aprovechan de los vecinos y sus necesidades. “Hay algunos que nos aplaudía por el esfuerzo, nos felicitaba casi la mayoría, y hay otra que desconfiaban”, reconoció Herminia Valencia.
Sin embargo, la inmensa mayoría accedía muy agradecida a la inscripción, porque ha sido una victoria la comprensión de que la pandemia se terminará con la vacunación. Esta experiencia nos llevó a que debatiéramos en todas nuestras organizaciones del distrito la necesidad de volcar todas nuestras fuerzas a esta actividad con esta orientación.
Al servicio del pueblo
De esta forma, en el mes de abril pasamos a tener mesas y cuadrillas de rastrillaje de lunes a viernes en Villa Celina, en trabajo conjunto con la delegación municipal, en el Barrio Sarmiento, en Villa Madero, en los barrios de La Loma, Don Juan y J. D. Perón de Gregorio de Laferrere, además de González Catán y Virrey del Pino. Hasta los primeros días de junio, tenemos contabilizados más de 4 mil inscriptos en mesas y en unas 200 manzanas rastrilladas.
En alguna de las muchas reuniones preparatorias debatíamos que ser parte de esta campaña podía significar para muchos vecinos seguir o no con vida. Pero de esto solo tomamos cabal conciencia y con una gran pena cuando, al poco tiempo de empezar a inscribir vecinos, nos enteremos que varios ya habían fallecido de Covid-19 y no llegaron a la vacuna. Con una gran vocación de estar al servicio del pueblo, en un momento tan difícil, hemos emprendido esta campaña cuya experiencia nos marcara hacia el futuro en nuestro desarrollo.
Corresponsal
