Convocada por la gobernadora María Eugenia Vidal, se realizó la primera reunión paritaria del año el pasado 13 de febrero. Esta reunión recién sucedió tres semanas antes del comienzo de clases, a pesar del reclamo desde diciembre de 2018 del Frente de Unidad Docente Bonaerense para efectuarla. De esta manera, la gobernadora comienza el chantaje que nos realiza a los docentes acusándonos de usar a los chicos de rehenes, negando su responsabilidad en la destrucción de la educación pública.
La oferta del gobierno consta de una actualización de salarios (sin porcentaje aún) y un ajuste por inflación (cláusula gatillo). Esta oferta fue rechazada por los gremios docentes ya que no se hace mención a una recomposición del salario después de lo perdido en el año 2018. Ese año, nuestros salarios quedaron entre 15% y 18 % por debajo de la inflación. Así también, el Frente de Unidad Docente Bonaerense planteó la necesidad de sumar como puntos a discutir infraestructura, formación docente, comedores y material didáctico. En el contexto de los siderales aumentos de los tarifazos en los servicios, medios de transporte y alimentos, el salario de los y las docentes está por debajo de la línea de pobreza.
En enero no hubo convocatoria a los gremios por parte del gobierno. Pero lo que sí existió fue la creación de “Mesas Educativas Distritales”. Estas mesas integradas por concejales, consejeros escolares e inspectores buscaban atacar a los docentes con el objetivo de lograr el arranque de clase el 6 de marzo sí o sí. El sábado 16 de febrero, a tres días de la reunión paritaria fallida, se realizó el cierre de las Mesas Educativas en Ensenada a la que concurrieron funcionarios de Cambiemos, intendentes, consejeros escolares y concejales. Éste es el contexto que genera la gobernadora Vidal de la mano de un arsenal mediático que busca culparnos a los docentes de los problemas de la educación, y que plantea que usamos a los estudiantes como rehenes.
Es imprescindible aprovechar estas semanas para discutir en todas las escuelas junto a la comunidad educativa, reforzando los cuerpos de delegados con el mayor protagonismo de los y las docentes que sostenemos y defendemos la escuela pública, gratuita y de calidad.
Corresponsal
