Lucha de líneas en los Encuentros de Mujeres y Diversidad

36º Encuentro Plurinacional de Mujeres y Diversidades de la Argentina

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Ya desde el año pasado con la división de los encuentros tras el cambio de nombre quedó expresado que el movimiento de mujeres, diversidades y feminista atraviesa debates profundos. Esto incluye el carácter de los encuentros, su nombre, el nombre de los talleres y su línea general. En estos últimos dos años fue ganando hegemonía en las comisiones organizadoras el sector que ha motorizado el cambio de nombre. Suelen decir en los talleres que “reconocen la historia de los encuentros hasta acá, pero que ahora es una nueva etapa bajo otra mirada”.

Detrás del cambio de nombre se encierran varios debates. Principalmente hay dos enfoques con los que polemizamos: por un lado, una visión plurinacional, que no reclama que la Argentina sea un Estado plurinacional como Bolivia, sino que con el pretexto de desconocer el Estado, reduce al nuestro país a un “territorio”, lo que es funcional a las potencias que se disputan el control de nuestros recursos. El peso de este enfoque en las últimas dos comisiones organizadoras, llevó a que no se cantara el himno nacional en los actos de apertura. Esta visión, niega la propia historia revolucionaria por la independencia que tiene nuestro pueblo.

Por otro lado, hay quienes promueven la palabra disidencias y terminan reduciendo al encuentro como “pluri disidente”. Así terminan borrando el protagonismo de las mujeres como sujetos políticos principales de estos espacios, e incluso de las propias diversidades.

La palabra “disidente” alude a una postura política de un activismo que antagoniza con todo lo que considera “hegemonía”. Incluso contra las mujeres “cis heterosexuales blancas” y con trabajo registrado, que según este foque son parte de la “hegemonía”. Y por el contrario concibe a la prostitución como un acto “disidente” y “contra hegemónico” a reglamentar “como cualquier trabajo”, y no una práctica a la que se ven sometidas las mujeres y una gran parte de la población trans-travesti, y que buscamos abolir. Las grandes ninguneadas bajo “la disidencia” son las mujeres y diversidades trabajadoras, que son el principal sujeto de los Encuentros.

El concepto dialectico “disidencia” es completamente distinto y contrapuesto al de diversidades género-sexuales. Y desde ya también al de pueblo. Disidencia es un concepto de raíz posmoderna que sectariza el movimiento y lo escinde del proceso popular contra la reacción. Desde este enfoque, las últimas dos comisiones organizadoras definieron una nueva estructura y nombres de los talleres organizados bajo esta línea. Desde ya la propia dinámica de los Encuentros y el protagonismo multitudinario de mujeres y diversidades, desborda este marco de encorsetamiento, porque en definitiva la práctica de lucha popular de la que es parte el grueso del movimiento es lo determinante. Lo que no implica que sea necesario profundizar el debate frente a enfoques que sectarizan y dividen.