Han sido cinco años de lucha desde aquel 17 de diciembre de 2012, cuando comenzó la ocupación de tierras en Malagueño, Córdoba. Pero ya se van concretando los logros de tanto esfuerzo. Con las calles trazadas, aunque aún sin los servicios básicos resueltos, ya se ha avanzado en la distribución de lotes y ocupación efectiva para vivir. Se va concretando así el acuerdo firmado el 6 de diciembre pasado, tras una nueva movilización, firmado entre la Cooperativa 17 de diciembre, la Municipalidad y el monopolio cementero Holcim, anterior propietario de las tierras que aceptó finalmente donar. También se ha tenido que reclamar ante la gobernación de Juan Schiaretti, que dilataba las respuestas para urbanizar. Conversamos con Cacho Ramírez, presidente de la Cooperativa 17 de Diciembre, y Marina González, ambos miembros de la Corriente Clasista René Salamanca.
–¿Cuáles son los avances luego de que se logró firmar el acta-acuerdo a fines del año pasado?
M:–Después de eso muchos compañeros empezaron a construir en el loteo y empezamos a hacer los convenios de pre-adjudicación. Entonces cada compañero tiene su convenio. Hasta la fecha son más de 340 convenios entregados. Así cada compañero va a ser dueño de su tierra. Ahora estamos viendo como seguir. Luchar por todo lo que es infraestructura como agua, luz, cloacas y además los subsidios por vivienda.
–¿En qué situación está la urbanización de todos los terrenos?
M:–Estamos luchando para lograr un acuerdo con Desarrollo Social de la Provincia por la infraestructura, que es agua luz y cloacas. Pero a su vez, nosotros ya hemos comprado 400 metros de caños para ir adelantando nosotros, para tratar de apresurarlos, sobre todo con el agua. Ya está hecha la apertura de calles, supuestamente íbamos a tener el 020, que es la consolidación final de la calle. Pero primero hay que hacer el zanjado para la colocación del agua y cloacas, y después la consolidación de la calle. Ya tiene forma de barrio. Pasó de ser un descampado a ser un barrio. Hay gente que pasa de un lado a otro.
–Comentaban sobre los subsidios de vivienda…
M:–Son subsidios para la construcción de viviendas. Había un programa el año pasado, que este año quedó fuera de vigencia. Pero ahora vemos que hay otros programas. Estamos viendo cómo luchamos para arrancarle ese programa para que todos los compañeros.
C:–Desde la historia del movimiento obrero se nos han negado muchas cosas que nos corresponde por derecho. El movimiento obrero ha ido consiguiendo con mucha lucha lo que le corresponde por derecho. Nosotros acá es un derecho que tenemos sobre la vivienda y no estamos dispuestos a renunciar a esos derechos. El tema es cómo nos organizamos desde la René Salamanca para ir consolidando la unidad que hemos logrado con la lucha de los últimos cinco años, para avanzar en los otros derechos que nos corresponde como vivienda digna con luz, agua y cloacas.
–¿Cómo han definido el orden de mérito para la adjudicación de los terrenos entre quienes accedieron y los que todavía están esperando?
C:–El orden de mérito lo establecemos a través de la participación en la lucha, porque lo que se ha conseguido ha sido con mucha lucha. El gobierno provincial ha largado un programa y luego vende los lotes a 300 mil pesos. Nosotros a lo que hemos accedido, lo hemos logrado con mucha lucha. Fueron cinco años de lucha para poder acceder a ese pedacito de tierra. Por lo tanto el criterio de selección de cómo acceder a los terrenos que íbamos accediendo con la lucha, con un puntaje: esfuerzo, sacrificio y lucha. Para dar un ejemplo, nosotros venimos desde hace un año y 3 meses que instalamos la carpa. Hemos recorrido dos inviernos muy crudos. Pasamos frío. Fue muy duro. Había que estar las 24 horas, de lunes a lunes. Por eso ese fue el criterio para ir accediendo a los terrenos que fue justamente el sistema de puntaje.
–Además decidieron darle un terreno a una ONG.
C:–Sí, es una fundación de padres y amigos de chicos discapacitados. Nosotros consideramos que son chicos nuestros. Es una fundación que trabaja hace más de 15 años y todavía no tenía terreno. Tenían un local prestado, donde hacían las actividades para juntar fondos. No han recibido ningún tipo de respuesta por parte del estado, ni provincial ni municipal. Ni siquiera por la empresa Holcim que tiene como logo la responsabilidad social. Entonces es nuestro compromiso como organización social; y desde el punto de vista legal es la Cooperativa la que puede donar el terreno a la fundación.
–¿Cómo es que debaten y deciden estas cuestiones entre los miembros del movimiento?
C:–Nosotros tenemos representatividad en seis barrios [de Malagueño]. Cada barrio tiene sus delegados y son ellos los que conforman la mesa local del movimiento. Se juntan una vez por semana. Hay 16 delegados en representación de los seis barrios. Debaten y generan propuestas. De ahí se saca una propuesta unificadora, trayendo la problemática de cada barrio. Son discusiones muchas veces profundas con mucho contenido político. También hay muchos intereses, porque hay compañeros que han sido candidatos de algunas listas en el pueblo. Por lo tanto todos tienen algún objetivo político mirando lo que es la lucha por la tierra en Malagueño. Porque esa es la frutillita del postre que todo el mundo se quiere comer. Pero muchos se habían quedado afuera, porque hemos sido nosotros los que hemos empujado la lucha y no hemos sido candidatos. Nosotros venimos a dejar dentro del movimiento dos estilos totalmente distintos de la política. Donde están los que gobiernan en el Municipio hace 30 años y que fue una política de negación de los derechos de los vecinos; y está la política que impulsamos nosotros que es la política de unidad, de la lucha y lo que se consigue con esa lucha se distribuye entre los compañeros y es gratis. O sea, no le estamos poniendo precio a lo que se consigue.
M:–Nosotros empezamos a existir cuando nos unimos y nos atrevimos a luchar a partir del 17 de diciembre del 2012.
–¿Cómo ha repercutido en el resto del pueblo los avances que han tenido con la lucha?
C:–Más allá de los otros avances que hemos tenido, con la lucha por la tierra también hemos ido generando condiciones para las familias más necesitadas del pueblo, de aportar de alguna manera para ir resolviendo su situación. Por ejemplo tarjeta social, módulos alimentarios. Estos han sido conseguidos por los compañeros de Buenos Aires, que han ido llegando los módulos de mercadería a Córdoba, que se distribuyeron entre Villa Libertador y Malagueño. También los programas de empleo, como el Construyendo Empleo y Salario Social Complementario donde tenemos ya 78 compañeros que están cobrando y están en el Ministerio de Trabajo para 200 compañeros más. Por lo tanto estamos contribuyendo como movimiento social a las familias más necesitadas. Eso tiene una repercusión porque desde el Municipio no hacen nada. Entonces hay otra mirada sobre el movimiento y los compañeros que están a la cabeza de esto.
Nosotros venimos de conformar, hace 15 días, la mesa coordinadora provincial de la Corriente René Salamanca en Córdoba y tenemos el orgullo que cinco compañeros de Malagueño formen parte de esa coordinadora provincial. La René Salamanca en Córdoba existe desde hace tiempo, desde que rompimos con la CCC.
–El otro día hicieron una “pollada”, ¿con qué objetivo?
M:–Hicimos una pollada en beneficio de los compañeros que no han podido pagar el convenio de pre-adjudicación, donde vendimos doscientos pollos. El convenio tiene un valor administrativo de 1000 pesos. Pensamos realizar una actividad en el terreno cada dos semanas, porque el terreno está como en el medio del pueblo, entre dos barrios. Entonces se presta mucho para realizar actividades. Es ir generando un ejercicio de que el sacrificio individual, pero el beneficio colectivo. Esto es muy importante, tenemos que luchar contra el individualismo. Estas luchas son las que le demuestran a los compañeros que estando unidos se pueden lograr cosas.
