Niñas, no madres

En las últimas semanas la sociedad fue estremecida por el caso de la niña de 12 años que fue forzada a llevar adelante un embarazo producto de una violación de un hombre de 60 en Jujuy. Haciendo caso omiso del pedido de interrupción legal del embarazo solicitado por la niña y su madre (consagrado en la legislación nacional y provincial), se dilató la situación intencionalmente y terminaron practicándole una cesárea. Sin embargo, la niña nacida prematura con 700 gramos de peso falleció a los 5 días, como era previsible.

Es un ejemplo claro de violación de los derechos posibles, donde se sometió a un trato tortuoso a una niña que ya había sido víctima del delito de violación, que ahora deberá cargar con un trauma más y una cicatriz en su cuerpo. Una muestra más de que la consigna “salvemos las 2 vidas” y el pañuelo celeste que enarbola orgulloso Gustavo Alejandro Bouhid, ministro de Salud de la provincia, es un slogan engañoso que no salva a nadie y encarna más violencia hacia las mujeres y niñas.

El gobernador Morales, implicado en la responsabilidad política de no haber garantizado la ILE, defendió la forma de actuar y se lamentó de que “las cosas salieran mal”. Sin embargo, horas después renunció el jefe de Obstetricia del Hospital Materno Infantil de Jujuy.

En Argentina, cada 3 horas una niña de entre 10 y 14 años tiene un parto. Este hecho merece especial preocupación no solo por el riesgo de mayores complicaciones físicas que representa el embarazo a tan temprana edad, ya que las niñas embarazadas enfrentan mayores riesgos de eclampsia (convulsiones seguidas de un estado de coma), endometritis puerperal e infecciones sistémicas, sino porque a menor edad mayor es la probabilidad de que el embarazo sea producto de abuso sexual, relaciones forzadas y/o explotación sexual.
Por esta razón, generó tanta bronca en indignación la editorial de La Nación reivindicando a las “Niñas-Madre”, que se ganó el repudio en primer lugar de los trabajadores y trabajadoras del diario y de un amplio sector de la sociedad que se expresó por redes sociales y en la movilización convocada por las organizaciones de mujeres de Jujuy que se realizó en muchas ciudades del país el pasado viernes 1º de febrero. En CABA se marchó desde el ex Ministerio de Salud a la Plaza de Mayo.