El policía de la Federal Facundo Aguilar Fajardo fue imputado por dolo eventual: esto significa que sabía que los once disparos que hizo podían causar daño otra persona más, como ocurrió con Thiago Correa de 7 años que recibió un tiro en la cabeza mientras esperaba en una parada de colectivo. A la vez, esta carátula no reconoce la “legítima defensa” por matar por la espalda a uno de los asaltantes mientras huían en La Matanza.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, salió en defensa del agente y culpando a los dos asaltantes por la muerte de Thiago. Pero lo que muestran los hechos es que la desproporción de vaciar un cargador completo sobre dos asaltantes en huida y desarmados pone en peligro a la población civil que las fuerzas de seguridad supuestamente deben proteger. Así se evidencia las trágicas consecuencias de la doctrina Chocobar que impulsa Bullrich.
