Chau Otranto!

Ya era cada vez más insostenible. El juez Guido Otranto fue separado de la causa que investiga la desaparición forzosa de Santiago Maldonado. La recusación había sido hecho por la familia y también por el CELS. Es un gran logro dentro de un sendero embarrado desde el inicio. El gobierno se declaró en contra de su remoción a través del ministro de Justicia, Germán Garavano. El pueblo movilizado pudo más.

Uno de los motivos con que la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia argumentó su resolución fue por el pre-juzgamiento que difundió el propio juez a través de una entrevista con el diario La Nación, opinando que lo más probable sería que Santiago se habría ahogado. Pero en verdad este es apenas uno de los motivos que justifican su apartamiento. Además podemos señalar:

  • De movida, Otranto es el mismo juez que ordenó el desalojo a los mapuches de Pu Lof en Resistencia Cushamen de la ruta 40. Gendarmería argumentó que entraron al territorio comunal a partir de este operativo. Entre el juez y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, aún no se han puesto de acuerdo en quién dio la orden de atravesar la tranquera. ¿No sería investigarse a sí mismo?
  • Se negó a indagar al Jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad, Pablo Noceti, que había estado en el lugar ese 1º de agosto que desapareció Santiago. Tampoco investigó sus llamadas.
  • Tardó más de una semana en requisar las camionetas de Gendarmería, después de haber sido lavadas. No requisó el unimog que bajó hasta la vera del río.
  • Tardó más de 40 días en indagar a gendarmes.
  • En uno de los allanamientos no quiso levantar las vainas de FAL y 9 mm que habían sido encontradas por un policía rionegrino.
  • Hizo la vista gorda sobre la adulteración de los libros de registros de Gendarmería, irregularidad detectada recién cuando se abrió el secreto de sumario.
  • No investigó la llamada al celular de Santiago realizada por un amigo al día siguiente. Tampoco recibió a los peritos de parte que investigaron esa llamada.
  • Realizó todo tipo de allanamientos y procedimientos distractivos, o incluso intimidatorios sobre los propios testigos en la causa.
  • El juez además espera ser ascendido, para lo cual necesita el visto bueno del gobierno. ¿No influyó esto en su desempeño?

Ahora, con otro juez, la lucha sigue. Fuera Bullrich. Aparición con vida de Santiago.

 

Fuentes: