En la semana del 8 al 13 de mayo, fuimos miles los docentes universitarios que le expresamos al gobierno nacional nuestro rechazo al infame techo salarial de 18% que insisten en imponernos cuando la inflación anual –a la luz del primer cuatrimestre– se proyecta al 27 o 28%.
Con paros contundentes y sin asistencia en las distintas facultades de todo el país, con radios abiertas, ruidazos y cientos de clases públicas nos expresamos en una nueva etapa de la lucha en la que confluimos las tres federaciones docentes universitarias (Conadu Histórica, Conadu y Fedun) a lo largo de seis días de paro: un escenario que no se daba desde el año 2005, cuando con una gran lucha conquistamos el blanqueo de nuestros salarios.
Nos preparamos para participar de una masiva marcha nacional universitaria que se realiza al cierre de esta edición, el martes 16, que inicia en el Congreso Nacional, pasará por el Ministerio de Educación y terminará en la Plaza de Mayo. La ConaduH y Conadu han expresado su voluntad de culminar en la Plaza de Mayo, centro del poder político nacional y donde se definen las políticas de ajuste que venimos enfrentando. La FEDUN decidió marchar sólo al Ministerio de Educación, una importante concesión al gobierno nacional y los rectores que aplican el ajuste y una política que mella la unidad necesaria para triunfar en esta lucha.
El miércoles 17, el Plenario de Secretarios Generales de la ConaduH evaluará el impacto de las medidas de fuerza y decidirá cómo darles continuidad en caso de no haber respuestas satisfactorias por parte del gobierno nacional.
Tras dos meses de lucha, es claro que el gobierno apuesta al desgaste, al igual que con los maestros, con el objetivo de imponernos el ajuste de la mano de una escalada represiva. En este escenario buscaremos todas las formas para darle continuidad a la lucha, regulando nuestras fuerzas para no agotarlas en una lucha que ya lleva dos meses y en la que podemos ganar si golpeamos con firmeza y unidad el plan de ajuste del gobierno.
Corresponsal
