El FMI en Grecia: Acuerdos nada platónicos

Grecia recibió tres “rescates” de parte del FMI, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo. Uno de 110.000 millones de euros en 2010 (un acuerdo Stand By, como el pactado por Argentina y el FMI). Otro de 130.000 millones en 2012 y uno por 86.000 millones en 2015. A cambio exigieron reformas y políticas que sumergieron aún más a Grecia y a su pueblo. Durante ese período:

• Se generó nueva deuda externa por 260.000 millones de euros.

• La deuda pública ascendió al 179% del PBI en 2017, uno de índices más altos del mundo.

• Llevan 8 años de recesión.

• Cayó 30% el PBI.

• La tasa de desempleo se sitúa en un 20,7% y el de los más jóvenes 40,8%. Los números más altos dentro de la Unión Europea.

• Los sueldos perdieron un 30% de poder adquisitivo.

La troika (FMI-CE-BCE) además exigió:

• Eliminación de los de los convenios colectivos de trabajo.

• Recorte del gasto en salud y despido de enfermeros y médicos.

• Reducción del gasto en el sistema previsional.

• Despido de 350.000 estatales.

• Abolición de las paritarias.

• Recorte del derecho de huelga.

• Los maestros terminan su contrato cuando terminan las clases para no pagarles vacaciones y se reincorporan al reinicio de clases.

• Plan de privatizaciones, incluyendo los puertos de Pireo y Salónica, la venta de los 14 aeropuertos regionales y el aeropuerto internacional de Atenas, la concesión por 35 años de la autopista Egnatia, la privatización del sistema de energía, de la empresa de telecomunicación Hellenic Telecommunications Organization SA (OTE), de la de correo Hellenic Post SA (ELTA), y de la compañía de loterías pública.