El 10 de diciembre sesionó el Congreso Ordinario de la FUBA, convocado por la Junta Representativa, con 10 de las 13 presidentes de los centros de estudiantes, y la participación de 71 delegados, 5 más que el quórum necesario. Los delegados de las fuerzas que venían de pretender hace unos meses hacer pasar un Congreso trucho avalado por el Rectorado no se acreditaron, pero fueron minoría.
Así constituido sobradamente el quórum, se presentaron dos listas. La Lista 1 se impuso con 64 votos y Fernando Ramal (PO) y Eva Dimopulos (La Mella) serán los nuevos co-presidentes de la FUBA, Lucía Cámpora (La Cámpora) y Sacha Unamuno (Nuevo Encuentro) se desempeñarán como vicepresidentes , Valeria Spangenberg (Somos) y Paloma Posadas (Colmena-Seamos Libres) serán las nuevas secretaria general, con la suplencia de Alan Hess (Fana) y Carla Arias (Cupp). A la vez que Sofía Rocha (Estudiantes por la Liberación) será la titular de la Secretaría de Articulación Territorial en acuerdo con La Dignidad. El MST sumó su voto por el frente aún sin integrarlo. Por otra parte la lista del PTS+Izquierda Socialista con 6 votos obtuvo una secretaría, completando la Junta Ejecutiva de la federación.
La masiva lucha presupuestaria y salarial que conmovió las universidades y salió a la calle para enfrentar el ajuste del gobierno de Macri, mientras cerraba su acuerdo con el FMI, y la unidad frente a la maniobra urdida por Cambiemos (Franja Morada-Nuevo Espacio) con el MLI y la UES, orquestado por el Rectorado de Barbieri, fueron el motor en la amplia unidad que expresa La lista 1. Quienes integran este frente han sido las fuerzas que han estado a la cabeza de estas luchas.
La confluencia y organización del frente se dio a través de dos alas: por un lado el Partido Obrero donde primó para la FUBA el enfoque que tuvo en los centros de Medicina y Agronomía –donde encabezó y participó de frentes unitarios, y no tipo FIT, teniendo en cuenta que el resto de las fuerzas que lo integran son opuestas al frentismo en el movimiento estudiantil–. Por otro lado se ordenaron las fuerzas que identifican la lucha contra el gobierno de Macri y Cambiemos como cuestión principal y motorizan una unidad general en ese sentido.
Estudiantes por la Liberación (ExL) trabajó a su vez para que la composición fuera proporcionada, justa e integrase a todos las fuerzas opositoras. La bifurcación y el vuelco hacia una identificación kirchnerista de La Mella (Itai Hagman) puso en esta oportunidad más a foco la necesidad de que fuerzas como ExL y La Dignidad tuvieran una secretaría, y a la vez Somos (Donda) y Movimiento Evita y otros compartiesen la Secretaría General.
La conformación y el triunfo de esta lista unitaria es un gran paso para el movimiento estudiantil, en el sentido de derrotar la política y al gobierno de Macri y el intervencionismo del Rectorado de la UBA y así el ajuste a la universidad pública. Entre las mociones votadas por los delegados está la convocatoria a un Congreso Extraordinario de la federación para el mes de abril del año que viene, cuando se reinicie el ciclo lectivo en la UBA, con asambleas, paneles y comisiones en todas las facultades que sirvan para formular las principales demandas del movimiento estudiantil y la juventud argentina, y a aprobar un plan de acción para salir a la lucha.
Corresponsal
