Haciendo uso de una resolución de una Cámara porteña contra el DNU presidencial dada a conocer el domingo por la noche, el jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta dispuso la continuidad de las clases presenciales a pesar del agravamiento de la situación sanitaria en el AMBA. La Cámara porteña en lo Contencioso Administrativo no tiene atribuciones para juzgar sobre un DNU de alcance federal, por lo que el desafío del gobierno porteño al gobierno nacional abrió una crisis institucional. En simultáneo, Larreta había pedido a la Corte Suprema que declare inconstitucional el DNU, judicializando así la política sanitaria.
El presidente Alberto Fernández cuestionó inmediatamente el “estrago jurídico” que implica esta resolución. La ministra de Salud Carla Vizzotti hizo a su vez una presentación en el fuero contencioso de la Ciudad para que la cuestión se traslade, como corresponde, al fuero federal. El gobierno nacional se presentará además en el fuero contencioso administrativo federal solicitando la inhibitoria de la justicia porteña. El ministro de Justicia ha reclamado que la Corte Suprema dictamine de forma urgente. La Corte acaba de aceptar su competencia; habrá que ver su resolución.
También los gremios docentes y de trabajadores de la educación convocaron a paro en nombre de la salud y la vida, y llaman a respetar el DNU. Luego se sumaron los organismos de derechos humanos y cada organización popular se va pronunciando a favor de los cuidados sanitarios.
En Argentina ya entramos en la segunda ola. Tenemos circulando nuevas cepas más contagiosas. Venimos superando día a día el máximo de contagios diarios y las muertes diarias siguen creciendo. En CABA ya no hay más camas de terapia intensiva en las clínicas privadas, donde se atiende el 80% de su población. El riesgo de colapso es para todo el AMBA. Según diversos estudios científicos, la circulación del virus puede aumentar más de un 20% con clases presenciales. Si a Larreta le interesara verdaderamente la educación, debiera haber vacunado a más docentes y garantizado el acceso a internet para todxs lxs niñxs. Ahora, más que nunca tenemos que cuidarnos.
