Ofensiva judicial para desalojar a 112 familias

Conversamos con Rubén Ortiz, secretario general de CTA-A de Misiones, de la cual es parte el Movimiento Campesino Liberación.

Los compañeros del Movimiento Campesino Liberación (MCL) de Montecarlo, Misiones, han sido notificados de que José Antonio Palacio –juez Civil y Comercial Nº 1 de Primera Instancia de la Jurisdicción de El Dorado– ha hecho lugar a la demanda presentada por la Compañía La Misionera trabando conflicto sobre los terrenos donde 112 familias producen actualmente. En una demanda penal previa, realizada por esta la misma empresa, una jueza había determinado que no había “usurpación”, ya que para ello las familias deberían estar viviendo allí. Pero ahora vuelven a la carga.
“Esto es el intento, una vez más, de la empresa por desalojar. Lo que cambia es que tienen el apoyo de un nuevo juez, que quiere desalojar. El problema es que no nos puede desalojar si no vivimos allí. Pero lo más probable es que pretenda meter topadora sobre las plantaciones. Es muy grave eso”, expresó a Vamos! Rubén Ortiz, secretario general de la CTA-A de Misiones. El MCL es una organización de base de la CTA-A. “Ellos en otra época pusieron topadoras y nosotros frenamos. Mucho antes se viene peleando”, agregó.
Las familias producen allí desde hace unos 7 años. Producen yerba mate, variedades nativas de maíz, hortalizas, variedades de poroto, banana y verduras. “Se prohíbe el uso de transgénico en esta organización”, aclaró.
“La Compañía La Misionera es de los herederos de los Avellaneda. Esta empresa nace bajo el amparo de la ley fraudulenta de federalización de Misiones en 1880. Esto es el primer reparto de tierras. Ahí ellos acapararon toda la zona. Ellos antes producían básicamente yerba mate y ahora migraron y producen pino para las pasteras”, explicó. “Esto se da en un contexto en el que el Municipio pierde el 50% de sus plantaciones de yerba. Porque los dueños reemplazan la yerba por el pino y el eucapiltus. Entonces perdimos 4 mil hectáreas de yerba. De haber 1.100 tareferos, ahora hay 540 puestos de trabajo. Ellos anteriormente fueron hijos de peones rurales y ahora se transforman en campesinos pobres. Y de ese proceso nace el Movimiento Campesino”, precisó. Ahora esos trabajadores “se dedican a producir unas tierras que la empresa reclama como suya. Tienen un modelo de propiedad colectiva de la tierra. Tienen yerbales comunales porque ellos son tareferos.”
La demanda ahora es contra los delegados de este Movimiento, Omar Galeano y Omar Vargas. “Son dos compañeros que lideran la organización. La organización tiene una asamblea donde cada compañero opina libremente, pero a su vez las regiones tienen sus dos delegados que integran la organización. Y la organización tiene una escuela en el predio. Lo único que existe además de la chacra, es una escuela campesina para la reforma agraria. Lo que nosotros hicimos es crear una escuela de formación política para construir organizaciones. Y una de esas organizaciones que se creó fue el Movimiento Campesino para trabajar la tierra. Y ese Movimiento Campesino crea la escuela para la reforma agraria. Es una escuela que tiene por objetivo, a partir de la educación popular, construir organización y construir saberes y prácticas para la reforma agraria.”
“Lo curioso es que el Municipio, por ejemplo, nos arregló el camino. El Ministerio de Agricultura de la Familia nos dio semilla. No sé cómo el mismo Estado por un lado apoya y por el otro criminaliza”, finalizó.