Se desinfló el proyecto antiaborto

Llamativamente luego del fracaso de la Ley Ómnibus, la noche del 7 de febrero circuló un proyecto presentado por algunos diputados de La Libertad Avanza (LLA) que propone no solo derogar la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), sino además condenar el aborto incluso en casos de violación. Algo que ya habíamos superado desde 1921 en nuestro país. Según el proyecto redactado, la única forma en la que aborto no debe penalizarse es en los casos que haya un “peligro inminente para la vida de la madre”.

Rápidamente, el vocero presidencial salió a aclarar que el proyecto no fue impulsado de ninguna manera por el Poder Ejecutivo y la diputada Rocío Bonacci reconoció que lo presentó por voluntad propia. Luego, uno a uno los diputados y diputadas de LLA que figuraban se fueron despegando del proyecto hasta que sólo quedó una firma.

Más allá de lo bizarro de la situación, esto nos recuerda que uno de los objetivos de este gobierno –que buscará si se lo permitimos– es dar marcha atrás con uno de los derechos más importantes ganados en el último tiempo por el movimiento de mujeres y de las diversidades. No hay que olvidar que el proyecto en sí mismo expresa algo ya dicho públicamente por el propio Javier Milei, quien considera al aborto un acto de asesinato. Y hace unos días atrás Rodolfo Barra, procurador del Tesoro, quien tiene a su cargo la asesoría jurídica de la Presidencia de la Nación, junto a Martín Menem (al frente de la Cámara de Diputados) y Cristina Guzmán (muy cercana a Guillermo Francos) firmaron una nota de opinión en Infobae exigiendo la derogación de la ley votada en el 2020. En aquel momento, Manuel Adorni dijo que “es uno de los temas que planea tratar el oficialismo”.

No olvidemos tampoco que en la ya muerta Ley Ómnibus, aparecían inicialmente modificaciones a la Ley de los 1000 días, estableciendo conceptos como “hijo por nacer” y “vida desde la concepción”. La ley de los 1000 días fue hecha sobre la base de una perspectiva integral de la salud acompañando a las mujeres y personas gestantes en la decisión de gestar, parir y criar.

Por otro lado, son conocidos los vínculos del gobierno con los sectores evangelistas ultraconservadores, que se movilizaron en contra de la ley IVE en 2020. Sectores que protagonizaron los diferentes actos políticos del gobierno en plena campaña.

Por su parte, el ministro de Salud de la Provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, insistió con que desde la implementación de la IVE se redujo un 90% las muertes por aborto, dejando de ser la primera causa de muerte materna. Si a los números nos remitimos, defender la vida es acompañar la decisión de cada mujer y no obligarla a parir contra su voluntad.

Desde el movimiento de mujeres y diversidades estamos unidas y decididas a enfrentar las políticas de ajuste, hambre y entrega de Milei. Por eso el 24 fuimos parte activa del paro general y estamos preparando un 8 de Marzo masivo para seguir defendiendo nuestras conquistas. Ni un paso atrás.