Discursos en el homenaje a René Salamanca en Córdoba

Agustín Funes
Secretario del CR de Córdoba

Quiero agradecer a todos los compañeros presentes. La presencia de ustedes es la que constata que Salamanca dejó semillas. Hay semillas que pasan por sequías, hay semillas que florecen rápido. Nosotros, desde el 24 de marzo del ‘76 sufrimos una pérdida de 30 mil. Podrían ser miles de salamancas. Lo que hay que señalar primero es que esos 30 mil, son 30 mil experiencias que la dictadura vino de desintegrar, a asesinar y a hacer desaparecer.

Hoy el pueblo tiene muchas dudas cuando vota, porque parece que el único camino que se le pone por delante es el voto. Pero tiene una contradicción el voto: el voto verdaderamente más maduro, madura en la lucha en la calle. Esa es una contradicción. Entonces tenemos que ver que esas dos cosas se vinculan a un camino, que creo que es el camino que va a alumbrar la verdadera liberación de la clase obrera y el pueblo. Es el camino revolucionario.

Estamos aquí y a la espalda mía hay mil o más de mil obreros que leyeron lo que nosotros les trajimos sobre René Salamanca: las cartas que él les mandó a los compañeros de trabajo para prepararlos para parar el golpe. Fue el único dirigente que se puso al frente verdaderamente de lo que se venía. Yo me formé al lado de él, yo lo considero un visionario. Porque miró mucho más adelante para poder mirar lo que se venía contra eso que estaba adelante. Ese era Salamanca. Por eso fue capaz de denunciar el golpe y caracterizarlo. Era un verdadero clasista antiimperialista. Porque le daba a su clase la verdad de lo que venía.

Se me cristaliza la emoción de volver a ver a Salamanca. Yo lo conocí y hablar con él era una condición que las imponía él (SIC). Nosotros íbamos a hablar con los compañeros de las fábricas a las casas. Él me decía: ‘Agustín, yo voy a ir caminando, así aprovecho para conversar con vos y después hablamos los dos juntos con el obrero que vamos a ver’. Así era, simple, sencillo, sincero y verdaderamente proletario.

Pero los veo a ustedes y me reconforta. Porque los veo a ustedes en un lado, en otro en la lucha. O sea aquí, para hacerle este homenaje a Salamanca, está la lucha de Tierra del Fuego y esta la lucha de los petroquímicos de Bahía Blanca, y están esas lucha que tarde o temprano van a hacer que vuelven a marcar el camino a transitar como una de las únicas salidas. La lucha es el único camino. Alguien que no se equivocó que fue Carlos Marx cuando dijo que la felicidad es la lucha. Aunque no siempre ganamos, porque casi siempre nos cagan a palos, pero vale lo que aprendemos. Estar aquí rindiéndole homenaje a Rene es volver atrás, tomar lo mejor aquello y traerlo de nuevo al presente. Por eso en estos 40 años volvemos a rendir homenaje a él y a los 30 mil compañeros desaparecidos.

Guillermo Rocha
Por el Comité Central del CR-PMLM

Es muy emocionante estar acá en víspera de los 40 años del golpe donde el pueblo se está prestando a conmemorar la lucha de estos 40 años. Lucha con la que fundamentalmente la clase obrera y la lucha democrática de las Madres contra la dictadura. La clase obrera con el paro ferroviario del ‘77, del ‘79 y del ‘82. Es decir, acá hubo una columna vertebral para hacer retroceder a la dictadura. Y también se conmemora la lucha de los últimos 33 años de gobiernos constitucionales, no sé si democráticos, pero sí constitucionales donde también se vio que en definitiva el imperialismo y las clases dominantes seguían manteniendo el poder.

La Argentina de apresta a estos 40 años y estar aquí frente a la Renault, donde René Salamanca sentó las bases para lo que fuera el SMATA de Córdoba de los ‘70. Un ejemplo que se sigue hoy por ejemplo en la lucha de Tierra del Fuego. Yo estoy hablando acá porque Gustavo Funes, el secretario general del CR está en Tierra del Fuego donde Horacio Catena y muchos otros compañeros y compañeras están liderando una lucha que ha desbordó a un Gobierno que les ha metido un impuestazo apenas llegado. También tuvimos una movilización piquetera de más de 10 mil personas en la 9 de Julio, tenemos la lucha docente en Santiago del Estero, hicimos retroceder el 25% de aumento que pretendía Macri. Es decir, que éste no es un pueblo que va a agachar la cabeza porque estos ejemplos como el de René Salamanca y el de todos estos años de lucha nos marcan el camino. Y sabemos cómo reorganizarnos.

Venimos de un período con el gobierno kirchnerista que, por un lado, pretendió apropiarse de algunas conquistas del pueblo. Pero también vimos la Ley Antiterrorista , el acuerdo con Chevron y vimos ungir como jefe del Ejército a Milani. Este período abrió una división en el pueblo, donde muchas fuerzas democráticas y organismos de derechos humanos fueron cooptados inclusive. Ahora, en este período va avanzando la unidad desde abajo, quizás más rápido de lo que muchos esperaban.

¿Qué dijo? ¿Que empujó y que concretó Salamanca con los compañeros? Los cuerpos de delegados basados en asambleas de secciones, la revocabilidad de los directivos del sindicato para que no se alejaran de los trabajadores. Porque el clasismo antiimperialista, que es el que señaló Salamanca, integra el rol de la clase obrera contra la explotación, pero también el rol en liderar al conjunto del pueblo contra la dependencia. Ese entrelazamiento es el que el pueblo y la patria requiere para la liberación nacional y social. Por eso también Salamanca es un ejemplo en ese sentido. Compañero René Salamanca: ¡Hasta la victoria siempre!

Vitin Baronetto
Ex secretario de Derechos Humanos de la Municipalidad de Córdoba

Compañeros, compañeras:
Como todos los años, este lugar nos convoca para esta memoria que siempre debe interpelarnos. La memoria de nuestros muertos, de nuestros desaparecidos, de nuestros compañeros y compañeras que transitaron un tramo de sus vidas compartiendo con nosotros un camino y una búsqueda de transformaciones profundas de este sistema injusto, salvaje, de este sistema capitalista que no tiene empacho en dejar que los niños se mueran por desnutrición y queden los ancianos abandonados sin políticas protectoras, y tantos otros derechos vulnerados por la estructuración injusta de una sociedad en manos de los poderosos que acumulan para sus bolsillos exclusivamente.

En aquellos proyectos, en aquellas utopías que las veíamos como posibles, que las veíamos casi cercanas, jugamos nuestra vida. Porque estábamos convencidos. Sin especulaciones si en el medio de ese camino y esa lucha la vida se perdía. Estaba como parte de la contabilización de la lucha el riesgo de la entrega de la propia vida.

Siempre que recuerdo a mi compañera, que perdió la vida en el fusilamiento de acá de la cárcel de la UT1, y de tantos otros compañeros de lucha de acá de Villa El Libertador y del Barrio Comercial donde vivíamos, siempre que pienso en los trabajadores como René Salamanca, como Atilio López, como Tosco y como tantos otros que no tuvieron tanto nombre pero sin los cuales tampoco ninguno de estos que hoy recordamos con nombres hubieran sido tales. Porque las luchas no eran individuales, las luchas eran colectivas, Salamanca no era el iluminado René Salamanca, como Tosco tampoco fue el autor del Cordobazo, ni Atilio, ninguno de ellos fue lo que fue sin el colectivo de trabajadores y el pueblo que sí los contó como guía, como impulsores, pero que pusieron también su cuerpo y su sangre en ese camino. Casi nadie, creo que no hay una placita para Máximo Mena, pero Máximo Mena era un don nadie, era un trabajador, y quedó ahí en el camino del Cordobazo, y muchos otros. Para decir, en todo caso, este gesto nuestro aquí en este lugar, que afortunadamente está plantado en un lugar físico, porque eso nos obliga a juntarnos cada año, y tenemos un lugar donde estar. Los restos de él no están en un cementerio para que los vayamos a honrar. Pero está acá, y casi mejor que esté acá, aunque también en Justicia correspondería encontrar sus restos. Pero casi mejor que esté acá porque está enfrente de la fábrica a donde él se comprometió, donde él habló, donde él propuso, donde él contribuyó a la organización de los trabajadores.

Yo creo que si hoy recordamos a Salamanca, como a todos nuestros muertos y desaparecidos, no es para quedarnos y llorar el pasado y lo que no pudimos concretar, sino para sentirnos empujados. Yo me lo imagino a Salamanca empujándonos a salir a la calle, a dejar esta placita y a comprometernos en lo que cada uno tiene oportunidad de hacer hoy. No será la gran cosa, no serán las grandes manifestaciones de trabajadores lamentablemente porque también hubo una destrucción, una aplanadora que se llevó a 30.000, hubo también planes económicos que arrasaron a la clase obrera con despidos y desocupación y cierre de fuentes laborales, que se prolongó en todos estos años de democracia. Vale decir que queda para nosotros una tarea muy dura, muy interpeladora. No existen, en la envergadura que existían antes, aquellos referentes fuertes de los trabajadores que convocaban y movilizaban por la transformación de las estructuras injustas. Entonces es hoy un imperativo asumir ese compromiso y jugar lo que nos queda de nuestra vida en ese empeño, en un empeño de reconstrucción que no es fácil. Pero que no sea fácil no quiere decir que no hay que hacerlo.

Y a veces el horizonte se pone más oscuro, a veces se abre alguna lucecita. Y bueno, por allí hay que caminar, por allí hay que convocar, por allí hay que sembrar esta semilla de la esperanza convencidos de que hay cosas que parecen luchas perdidas y de pronto, no por milagro sino por la acción comprometida de quienes están convencidos, se producen cambios. No serán totales aún. Hay que apuntar siempre al cambio allí, al horizonte, a la utopía, y mientras tanto hay que conquistar las mejores condiciones de vida para los trabajadores, los pobladores, los ciudadanos, los que habitamos esta sociedad que no es muy distinta en cuanto a su estructuración a la de hace 40 años atrás.

Entonces, para concluir, quisiera sumar mi voz para decirles: sintámonos empujados por Salamanca. No lo dejemos a Salamanca solo, aquí, en esta placa. Es importante que esté la placa, porque el que pasa entonces se va a preguntar quién era si es que no lo conoció, y entonces alguien le dirá quién fue. Y si la historia es contada por quiénes la construyeron junto con él, seguramente esa historia va a contribuir a recuperar una memoria colectiva que debe repetirse, que debe inventarse otra vez con las características nuevas que la realidad impone hoy. Creo que es el mejor homenaje que podríamos hacer e este día a René Salamanca, que nos dejaba arrebatado en las sombras de la noche por aquellas hordas salvajes, asesinas, que sin piedad se llevaron a muchos de los nuestros y que eso nos ha comprometido también en estos años para que esos asesinos vayan a la Justicia, sean condenados, y, con todas las debilidades y peros que tienen estos juicios, se ha avanzado bastante. Queda muchos por hacer y muchas cosas que no se lograrán al 100%, pero éxitos vamos teniendo. En la medida en que estos viejitos que se ponen la cara de inocentes están en las cárceles y se van aflojando las rejas y los dejan salir, también hay que leer las realidades nuevas que van apareciendo, y por eso hay que comprometer también ese esfuerzo para que se consolide una memoria de justicia, de memoria y de verdad. Muchas gracias.

Pantera Alvarado
Ex cervecero e integrante de la Comisión Directiva del Centro Vecinal Alberdi

Gracias por haberme invitado a este homenaje al compañero salamanca. Creo que en algún momento en el 98 vimos a la imagen de un trabajador clasista como René Salamanca, y nosotros emprendimos ese camino, un camino de lucha de 105 días en el que no logramos salvar nuestra fabrica pero sí nos enseño un camino. Y hoy, a pesar de esos años seguimos luchando, porque creemos que la única posibilidad que le podemos dar a nuestros hijos y a nuestros nietos es el camino que nos dieron esos dirigentes como Salamanca, como Tosco, dirigentes clasistas que tos indicaron el camino de la lucha para cambiar todo lo que nos viene pasando a lo largo y a lo ancho de este país desde hace bastantes años a la fecha. Por eso gracias compañeros.

Vasco Orzaocoa
Izquierda Revolucionaria

Hoy estamos en presencia y recordando a rene salamanca y tenemos que su proyecto sus ideas y sus luchas siguen siendo actuales, que él por lo tanto sigue presente entre nosotros. Tenemos que decirte rene q no vamos abajar esas banderas. Que su sacrificio, el sacrificio de su familia, de sus hijos, no ha sido en vano. Que hoy las banderas que el enarboló, las luchas que él hizo, siguen estando presentes. Y que los jóvenes están tomando esas banderas, están tomando sus proyectos, los proyectos de liberación nacional y social que en nuestro país son proyectos inconclusos, son proyectos que no se pudieron concretar. Pero la historia, la crisis tremenda de este capitalismo que ya s un muerto, esa historia va a continuar y rene va a seguir presente. Y su lucha y la lucha de los 30.000 desaparecidos es la lucha que nos indica el camino.

Eduardo Salas
Legislador por el PO-FIT

Buenas tardes, compañeras y compañeros. Recordar y hacer memoria es muy importante. Y hacer memoria sobre un luchador obrero asesinado por un régimen que empezó antes del golpe que empezó en Córdoba en febrero del ‘74 con el Navarrazo, que luego con la Triple A se fortificó. Recordar a un dirigente obrero, que para más había ocupado un lugar predominante porque era la expresión de la lucha antiburocrática en un gremio fundamental, es decir que el tenia un plantemiento de defnsa de los explotados y planteamiento de lucha contra los agentes de los explotadores en el seno del movimiento obrero que era la burocracia sindical. Recordarlo es fundamental porque la esencia del golpe del ‘76 y de la Triple A y del Navarrazo fue imponerle a la clase obrera la liquidación de sus condiciones de vida, la liquidación de sus derechos laborales y someter el país al capital financiero. Esa fue la esencia y para hacer eso había que liquidar físicamente a una generación de luchadores que se había organizado, se había parado para hacer frente a esta situación. Por lo tanto recordar a Rene Salamanca es recordar y tener presente la esencia y el significado profundo del golpe genocida y la concordancia que absolutamente todas las fuerzas politicas a excepción de la izquierda y los luchadores, tuvieron con ese golpe militar. Les pusieron intendentes, funcionarios, embajadores, asesores. La concordancia entre las fuerzas políticas patronales y el golpe militar fue total porque había que meterse en un régimen que significaba para el pueblo trabajador y el pueblo argentino la liquidación de sus condiciones de vida y sus derechos. La memoria es fundamental. Pero tenemos un problema adicional en este 40 aniversario. Porque el problema central es que el pueblo argentino no dejó de tener memoria y cada 24 de marzo son más los que se movilizan y cada 24 de marzo se involucran generaciones que incluso nacieron much después del golpe.

Es decir que esta escencia del golpe está presente en el pueblo argentino y en los trabajadores argentinos y en su juventud. Y es eso lo que lleva a que hoy, a 40 años, tengamos el operativo más descarado para ir a la impunidad final. Obama viene a la argntina a fortalecer un punto final. El optro día hubo en la legislatura de la ciudad de buenos aires un homenaje por el 24 de marzo, y los legisladores del Pro dijeron que había que poner fin a estas heridas y dijeron abiertamente que había que poner fin a los juicios. Pero eso también lo dijo la misnistra de relaciones exteriores. Y lo dijo una de las que viene con Obama, dijo vamos a abrir los archivos porque van a ver que en realidad con esto lo que estamos haciendo es cerrar las heridas. Y esas heridas hay que cerrarlas con los militares, lo que significa que ni siquiera vayan a morirse en hoteles de lujo que son sus casas, sino simplemente que se acaben los juicios. Hay un opera tivo y hoy el que lea los diarios va a ver quea ese operativo se acaba de sumar descaradamente la ig lesia. Y ese operativo tiene que ver con la misma razón que el golpe, porque viene a fortalecer una nueva entrega a través de este pacto con los buitres. La deuda externa, el sometimiento al capital financiero está en la punta y el final de esta historia, es un hilo común entre la dictadura, los gobiernos de la democracia que vinieron a garantizar lo que la dictadura no podía. Y por eso una deuda que empezó en el 75 con 5.000 millones hoy está en 300.000 millones de dolares, que vinira un proceso de entrega, de liquidación y de robo del pueblo y de la nación argentina. Este 24 de marzo tiene que quedar clara esta posición, porque todos los gobiernos le buscaron una salida. Uno con el juicio a las juntas que dejaba a todos afuera, o con la Obediencia Debida, el Punto Final y luego los indultos. El mismo gobierno kirchnerista, que sacó los juicios cuando se vió obligado que tenía que mandar a los militares a España para evitar la extradición. Pero aparte, porque en este proceso común de lucha contra este ataque a los trabajadores y a la nación tenemos nuestros muertos en democracia. Está Verón y todos aquellas en la época de los 90. están Kosteki y Santillán, Carlos Fuentealba, Marano Ferreyra, y luego de Mariano Ferreyra hubo 15 más asesinados por luchar. Y paralelamente a esta situación, que busca cerrar los juicios a los militares –juicios que tampoco fueron demasiado lejos poruq esolamente tocarona unos poquitos y se hicieron largos, algunos pudieron morirse tranquilos-, se produjeron dos hechos muy importantes: se desetimo el juicio contra los responsables del asesinato de Fuentealba, el juicio Fuentealba Dos, y Pedraza, al que logramos meterlo en la cárcel como autor intelectual del crimen de Mariano Ferreyra logró con jueces subrogantes lo que no había logrado con el tribunal que lo condenó y está en un piso de lujo en Palermo viviendo su prisión, que debiera ser efectiva porque fue un asesinato organizado por el Estado, que tuvo implicancia no solamente en la muerte de Matriano y el deterioro brutal de la salud de Elsa Rodriguez, sino que luego 52 argentinos murieron en la masacre de Once como resultado de los negociados que se hacían con el ferrocarril. Hay una política general de impunidad para salvar a la clase capitalista y dejarle las manos libres, cerra las heridas para que vayan protocolo mediante, ley antiterrorista mediante, proyecto X mediante, vayan contra el pueblo trabajador que se alza contra esta entrega. Porque a lo que decía ¿agustin? Hay una nueva generación. Y esa nueva generación ha partido de dos cosas, primero que no tiene todo el peso de la historia que pesa sobre los trabajadores que venian con el peronismo etc etc. Y esa generación a abordado la tarea de recuperar los sindicatos. Hay camadas enormes de jóvenes delegados, de comisiones internas, de sindicatos y hasta de federaciones recuperadas. Sobre esa base el legado de Rene Salamanca, el legado de los 30.000 desaparecidos, el legado de llos muertos en democracia se hará realidad. Este 24 de marzo, miles contra la impunidad, miles contra la entrega, miles para ser independientes de quienes nos quieren llevar a un nuevo sometimiento.